Técnicas de Pintura: Temple y Fresco

El Temple: Una Técnica Tradicional

El término “temple” deriva del latín medieval temperare, que significa “mezclar”. Siguiendo este principio, todas las técnicas, salvo la pintura al fresco, serían temples, pues en todas ellas se hace necesario mezclar pigmentos con algún tipo de aglutinante. En cualquier caso, lo más racional es pensar que el término procede de la acción que desde la antigüedad se realizaba a la hora de templar y calentar las colas antes de aglutinarlas con los pigmentos.

Propiedades del Temple

Las propiedades más destacadas de los temples son su limpieza, vibración cromática y fluidez:

• Limpieza: Permite trabajar superficies en tintas planas uniformes.
• Vibración cromática: Es muy elevada, dado que los aglutinantes empleados en los temples no suelen intervenir ni condicionar el color original de los pigmentos a aglutinar. Son muy transparentes y permiten el paso de la luz y el color.
• Fluidez: Al ser un medio acuoso, no dejan apenas margen a la aparición de elementos mordientes, por lo que su aplicación tiene aspectos comunes con la acuarela, tanto por su transparencia como por su secado rápido.

Tipos de Temple

Para pintar sobre un panel de madera o sobre un lienzo, es necesario un aglutinante que, en el caso de los temples, se vincula a una emulsión donde, de un modo estable, se mezcla una sustancia acuosa con otra sustancia grasa. Por lo general, el aceite y el agua no se mezclan. Sin embargo, algunas sustancias naturales como la leche, el jugo de algodoncillo y la yema de huevo presentan partículas grasas suspendidas en un líquido acuoso. Por ejemplo, la mayonesa es una emulsión artificial, donde se combinan huevo y aceite.

Dentro de esas combinaciones, es posible encontrarnos con una variedad de temples, tanto naturales como artificiales, para la pintura. Entre ellos, destacamos:

• Temple al huevo: Utiliza solo la yema del huevo.
• Emulsiones de aceite y huevo.
• Emulsiones de gomas: Savia de árboles endurecida.
• Caseína: Cuajada de leche agria.
• Temples a la cola: El aglutinante debe haber sido calentado previamente para estar en un estado manejable y poder aglutinarse con el pigmento.

En definitiva, dentro de los temples es posible encontrarnos con sustancias de distinta procedencia. A continuación, pasamos a mostrar brevemente la composición de los principales tipos de temples tradicionales.

La Pintura al Fresco: Un Arte Mural Ancestral

La pintura al fresco es un procedimiento pictórico antiguo, bastante complicado y dificultoso de ejecutar, que se ha puesto muy de moda para la decoración de interiores de alta categoría. Es necesario tener experiencia y muchos conocimientos de pintura para utilizar esta técnica.

Características de la Pintura al Fresco

La pintura al fresco es un procedimiento pictórico mural empleado desde la antigüedad, que se realiza sobre una superficie cubierta con una delgada capa de cal apagada. Luego, se pinta mientras se encuentra fresca.

Los materiales empleados para pintar al fresco son minerales. La cal sirve como aglutinante y los pigmentos son a base de óxidos, de gran resistencia a la luz.

Esta técnica no es fácil y requiere de conocimientos y dominio de la pintura, por eso no es recomendada para novatos.

La decoración con pintura al fresco es sofisticada y elegante. En la actualidad, es una de las tendencias más de moda en la decoración de los grandes diseñadores.

Técnica de la Pintura al Fresco

Para pintar al fresco, simplemente se aplican los pigmentos minerales disueltos en agua sobre el muro preparado y fresco.

La cal fragua con el aire al contacto con el anhídrido carbónico contenido en este, y forma una película insoluble de carbonato cálcico en la superficie pictórica, que protege y adhiere al pigmento.

Requisitos del Muro

• El muro debe ser de material absorbente (piedra, mampostería).
• Estará libre de cualquier clase de humedades.
• La superficie del muro debe tratarse con un mortero de cal. No se empleará cemento Pórtland, porque aporta sales y disminuye el poder absorbente.

Materiales Básicos

• Cal
• Arena
• Pigmentos resistentes a la cal, principalmente pigmentos minerales como óxidos de hierro.

Procedimiento

1. El muro (soporte) debe mojarse abundantemente varios días antes de pintar.
2. Sobre este, debe extenderse el mortero de cal y arena, de un espesor de 0.5-1 cm, para que no se agriete al secarse.
3. Se deja secar de uno a tres días y se extiende nuevamente un mortero con más cantidad de cal en proporción 3:1. Se alisa bien, sin grosor.
4. Se aplica con la llana y el maletín, en italiano se llama “intonaco”.
5. Se puede dar una capa fina de cal sola, lo cual da una superficie más lisa.
6. Esta capa se debe extender solo en el fragmento de muro que se va a pintar en una jornada, de lo contrario, se secará demasiado y habrá que dar otra capa.
7. Los pigmentos se ponen en maceración y se emplean diluidos en agua.
8. Se utilizan pinceles blandos y bien aguados, pues se trabaja por transparencia.
9. El secado lento es mejor porque permite una mayor adherencia, aglutina y protege los pigmentos.