La solidaridad es el nombre actualizado del amor, es
una actitud que cambia la vida de la persona en orden
a implicaría con el destino del otro. En cuanto a principio
ético, la solidaridad transforma preferentemente la
organización de la vida social: sus relaciones, sus
instituciones, sus estructuras. Es un valor.
Solidaridad marista: porque reconocemos en la Virgen
María un estilo propio de encarnar los valores de
su Hijo Jesús, particularmente la solidaridad. También
Champagnat, también queremos decir que nuestra
práctica solidaria es intencionalmente educativa.
La historia de la Iglesia no se puede entender la historia
de la Iglesia sino se tiene en cuenta el ámbito histórico
y geográfico donde se tiene en cuenta el ámbito histórico
y geográfico donde se ha desarrollado.
Los religiosos: viven en comunidad siguiendo los consejos
evangélicos por eso se comprometen con los votos o
promesas de castidad, pobreza y obediencia. Con su estilo
humilde, austero y solidario los religiosos cumplen una
misión muy importante animar a los cristianos a seguir
a Cristo y a seguir la misión que Él les encomendó.
Castidad: vivir el voto de castidad sigue vivir una vida de
entregado total a los demás, por amor, renunciando a
la vida matrimonial y familiar como hijo de Jesús.
Pobreza: vivir el voto de pobreza seguir y vivir con
austeridad y compartir con los necesitados. Como
Jesús que fue pobre y se entregó por nosotros a los
pobres significa también vivir en comunidad,
poniéndolo todo en común, sin propiedades personales
tal como hacían los primeros cristianos.
Obediencia: vivir el voto de pobreza obediencia significa
buscar y cumplir en todos menos la voluntad de Dios,
al margen de Jesús que fue obediente a Dios hasta su
muerte. Para eso son necesarias la oración personal,
la disponibilidad y la ayuda de la comunidad