Santo Tomás de Aquino las vías y su estructura lógica

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3. Tema: Las vías y su estructura lógica
Antes de analizar cada una de las diferentes vías que utiliza Santo Tomás para demostrar la existencia de Dios, hemos de señalar que, a pesar de las diferencias, las cinco vías tienen una estructura lógica común. Pues, podemos comprobar que todas ellas se basan en cuatro pasos similares:


1er paso


: En primer lugar, todas las vías tienen un punto de partida empírico; parten de la experiencia, de la observación de la naturaleza, es decir, de un hecho que podemos encontrar en el mundo sensible porque nos lo muestran los sentidos. Por eso, las cinco vías comienzan diciendo: “perciben los sentidos...”, “encontramos que en el mundo sensible...”, “se puede comprobar observando...”, etc. De modo que el punto de partida es siempre el mismo: los seres sensibles; porque, según Santo Tomás, “todo conocimiento comienza con los sentidos”. Lo cual quiere decir que para conocer cualquier cosa tenemos que partir de lo que nos muestran los sentidos. Aunque, según él, una vez que hemos partido de lo que nos muestran, nuestro entendimiento es capaz de ir más allá́ de los sentidos para descubrir cosas que no nos muestran (como es el caso de la existencia de Dios). Ahora bien, aunque el punto de partida de todas las vías sea siempre la experiencia (los hechos), cada una de ellas parte de “un hecho distinto”, porque tiene en cuenta un aspecto de las cosas sensibles diferente: el “movimiento”, la “causa eficiente”, la “existencia”, la “perfección” o la “causa final”, que son los distintos “hechos” de los que parten las vías de Santo Tomás para demostrar la existencia de Dios.


2o paso


: En segundo lugar, Santo Tomás aplica el principio de causalidad con el fin de encontrar la causa de la existencia del efecto observado en la experiencia. Trata, por tanto, de pasar del efecto observado a la causa que lo ha producido, porque todo fenómeno tiene una causa que explica su existencia. O, dicho de otro modo, la causalidad le permite a Tomás de Aquino partir de la experiencia para demostrar que todo lo que sucede en el mundo tiene necesariamente una causa, porque si no existiese la causa el efecto no podría existir.





3er paso


: En tercer lugar, si la causa a la que hemos llegado en el segundo paso no tiene en sí la razón de su existencia debemos buscar, a su vez, cuál es su causa. Y si esta última tampoco existe por sí misma tendremos que encontrar cuál es la causa de esa causa. De modo que el razonamiento nos lleva a lo que parece una serie infinita de causas. Pero una serie infinita de causas a su vez causadas es imposible porque no explica cuál es el origen de la cadena de causas y efectos. [O, dicho con un ejemplo, si nos preguntásemos de dónde procede una gallina diríamos que de un huevo y éste, a su vez, de otra gallina y esta última de otro huevo y.., pero una serie infinita de gallinas y huevos no nos explicaría cuál es el origen de las gallinas ni de los huevos.]


4o paso


: Por último, las vías acaban concluyendo que debe existir una causa primera que nos permita explicar la existencia de la serie de causas y efectos. Y Santo Tomás llama a esa causa “primera” porque no puede estar causada por nadie, no puede ser, a su vez, efecto de otra causa, porque seguiríamos dentro de la serie causal y seguiríamos sin explicar el origen de las causas. Finalmente, dice Tomás de Aquino, a esa causa primera que explica la razón de la existencia de todo lo que existe la llamamos Dios. De modo que la única diferencia entre las diferentes vías, en este último paso, es que cada vía muestra un aspecto distinto de la esencia de Dios: como causa formal, causa eficiente, causa necesaria, causa ejemplar o causa final.
Una vez vista la estructura lógica que caracteriza a todas las vías en general, veamos:





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