Profundidad de Campo, Barrido y Revelado: Técnicas Fotográficas Esenciales

Profundidad de Campo

La profundidad de campo es el espacio nítido que queda delante y detrás del objeto enfocado, es decir, la zona enfocada.

Factores que influyen en la profundidad de campo

• Apertura del diafragma: Controla la cantidad de luz que llega a la película. Cuanto más abierto esté el diafragma, menos profundidad de campo. Cuanto más cerrado esté el diafragma, más profundidad de campo.
• Distancia focal: A mayor distancia focal, menos profundidad de campo, es decir, la zona enfocada es más profunda.
• Distancia cámara-sujeto: La profundidad de campo se reduce al disminuir la distancia cámara-sujeto.

La profundidad de campo es mucho más acusada en los paisajes que en las macrofotografías, en las que no supera unos pocos milímetros.

Diafragma seleccionado

Cuanto más abierto esté el diafragma ajustado para la toma, menor será la profundidad de campo disponible. Los diafragmas más cerrados logran profundidades de campo tan grandes que, con un objetivo normal, todo está enfocado desde las distancias medias hasta el horizonte.

El Barrido

El barrido consiste en seguir con la cámara el desplazamiento de un determinado motivo en movimiento. La cámara efectúa un recorrido horizontal y se limita a girar sobre su propio eje.

Factores que influyen en el barrido

• Distancia de la cámara al tema: Depende de la velocidad relativa del sujeto. Por ejemplo, el movimiento de un avión que se desplaza a 900 km/h se congela con facilidad.
• Velocidad y dirección del motivo: Estos dos parámetros son diferentes pero están muy ligados entre sí, ya que si el movimiento es paralelo al plano de la película, la velocidad relativa es mayor que si es perpendicular a dicho plano.
• El objetivo: La distancia focal convierte la tarea en más o menos compleja. Por ejemplo, el intento de realizar un barrido en una carrera de coches o motos con un gran angular puede resultar bastante complicado. El teleobjetivo, gracias al poco ángulo de cobertura y a la poca profundidad de campo que proporciona, es el objetivo ideal para lograr una buena imagen de barrido.
• La luz ambiente y la película: En el barrido hay que seleccionar con prioridad la velocidad de obturación, antes que la abertura del diafragma, y prescindir de la profundidad de campo.

Velocidad de obturación

• Velocidad rápida: Consigue detener el movimiento, es decir, que la fotografía salga fija y nítida por más que el sujeto se desplace rápidamente en el momento de la toma.
• Velocidad del tema: A mayor velocidad, más breve debe ser el tiempo de exposición para detener el movimiento. Por ejemplo, 1/250s es suficiente para fotografiar un grupo de niños jugando.
• Distancia del tema: Los temas cercanos requieren velocidades más altas que los alejados.
• Trayectoria del tema: Cuando el tema se aproxima a la cámara, el movimiento es menos aparente y puede congelarse con tiempos de exposición más largos.

Obturadores de cortinillas

Los obturadores de cortinillas tienen dos cortinillas elásticas que dejan entre sí una rendija, cuya anchura depende del tiempo seleccionado.

Ventajas

• Son independientes de los objetivos, ya que están en el cuerpo de la cámara.
• Son capaces de proporcionar tiempos breves, de hasta 1/8000s.

Inconvenientes

La inercia de las cortinas da lugar a que la exposición de la película no sea totalmente uniforme, aunque el defecto resulta mínimo. La exposición por franjas origina que los objetos en movimiento se acorten, aunque esta distorsión solo reviste importancia en casos muy específicos.

El Revelado

Dilución del revelador

Un revelador muy concentrado es demasiado rápido y difícil de controlar, y produce grano. La dilución del revelador facilita el control del tiempo, reduce el tamaño del grano, aumenta la definición de los negativos y disminuye la pérdida de sensibilidad de la película producida por el antivelo. Los reveladores diluidos producen más velo que los concentrados. Se puede elegir el grado de dilución del revelador para conseguir alta definición.

Temperatura

Los aumentos de temperatura aceleran el revelado y aumentan la densidad y el contraste de los negativos. La temperatura de 20ºC es la más recomendable, siendo 18ºC una temperatura normal. Las temperaturas superiores aumentan la sensibilidad de la película, incrementan el velo y el tamaño del grano.

Tiempo

La densidad de las luces (zonas oscuras del negativo) aumenta más rápido que las sombras (zonas claras del negativo). El tiempo es el factor que más se utiliza para controlar el efecto del revelado, por ser el más fácil de alterar en la práctica.

Agitación

El revelador agotado se acumula en la superficie de la emulsión, retrasa el progreso del revelado y llega a detenerlo. Para eliminar la capa agotada, que se adhiere con fuerza a la película, y sustituirla por una capa de revelador nuevo, es necesario agitar. El simple desplazamiento de la espiral arriba y abajo no es suficiente porque la emulsión arrastra consigo la capa de revelador agotado. En cubas pequeñas, la agitación suele hacerse invirtiendo varias veces rápidamente la posición de la cuba, con un movimiento parecido al que se imprime a una coctelera. La falta absoluta de agitación produce poca densidad y bajo contraste, desigual y con alto nivel de velo. El aumento de la agitación, hasta llegar a un cierto nivel, produce un efecto similar al aumento del tiempo y obliga a reducir este para obtener los mismos resultados. El fijador no precisa tanta agitación porque la capa de fijador agotado pesa menos que el fijador nuevo y se desprende ella sola por gravedad para ascender a la superficie del líquido.

Estado del baño

El revelador sufre la oxidación producida por el oxígeno del aire, que se acentúa con las traseras del líquido debido a la agitación tumultuosa, con el paso del tiempo.

Regeneración

Los regeneradores son líquidos con una fórmula parecida a la del baño madre, pero las proporciones en que se encuentran los distintos componentes no son las mismas y están calculadas para compensar las pérdidas que cada compuesto sufre durante el revelado.

La Película Fotográfica

La película es una cinta plástica recubierta por una emulsión sensible a la luz, compuesta de gelatina y sales de plata. Cuando la luz incide sobre la película, las sales de plata, fotosensibles, se convierten en plata y forman una imagen muy débil, llamada imagen latente. Cuanto más intensa y duradera sea la exposición, mayor será el efecto.

Características de las películas

• Formato: Es el ancho de la película, así como las perforaciones de los bordes. Las películas de formato 135, también llamadas de paso universal, tienen 35mm de ancho y perforaciones en ambos bordes. Pueden ser de 12, 24 o 36 exposiciones.
• Tipo: Pueden ser para color o blanco y negro, para negativos o diapositivas, que se utilizan para la proyección sobre una pantalla o para la impresión.
• Sensibilidad: La sensibilidad de una película es su capacidad para reaccionar ante la luz. A mayor sensibilidad, menor cantidad de luz se necesita para obtener un buen negativo. Una película muy sensible necesita poca luz para dar un buen negativo, mientras que una película de poca sensibilidad necesita más luz para conseguir los mismos resultados. La sensibilidad se mide en grados ISO. 100 ISO es una sensibilidad media, 200 ISO es el doble de sensibilidad y 50 ISO es una sensibilidad baja.