Orígenes de la actividad comercial: intercambio de productos a lo largo de la historia

T3 Orígenes de la actividad comercial: Desde el origen de la humanidad, el hombre ha intercambiado productos con otros, ya que producía algunos en exceso, pero les faltaban otros. Gracias a los arqueólogos y sus investigaciones en antiguas ruinas, encontramos bienes como cerámicas, telas, maquillajes, armas e incluso alimentos procedentes de otras áreas geográficas.

• Antigua Grecia:

  Restos de intercambio comercial entre las ciudades del Estado. Atenas producía aceite de oliva (conserva alimentos ya que no deja pasar el oxígeno), a cambio de pasas de Corintio (conservar productos perecederos).

• Roma:

  Inicios agrícolas y ganaderos. Poco a poco va armando ejércitos (soldados eran mercenarios que recibían un salario “sal”). El ejército va siendo más poderoso y le mandan a otras ciudades. Cuando los romanos ganaban, tenían derecho a saqueo: esclavizan habitantes y requisan objetos. Si los hombres eran fuertes, iban al circo para gladiadores. Las mujeres y niños se vendían en el mercado de esclavos para tareas domésticas, trabajo de campo o esclavas sexuales. Un niño nacido de madre esclava era esclavo, independientemente del padre. A veces el amo liberaba al niño mediante la entrega de un objeto personal. El esclavo se convertía en un liberto (hombre libre, pero no ciudadano romano). Si era hijo del amo y este le reconocía como tal, sí era ciudadano y tenía los mismos derechos. Los ciudadanos romanos eran el grupo más alto social, podían ser nombrados senadores y tenían privilegios de voto. La mujer romana era considerada jurídicamente como menor de edad, es decir, pertenecía a una familia aristocrática pero no disponía de bienes. El concepto de “Pater Familiae” era el clan de la familia, todo con su consentimiento. La mujer, al casarse, pasaba del control de su padre al control de su marido. A veces, entraban al servicio del Templo de Vesta, diosa romana, donde tenían que guardar abstinencia y ayuno, sino eran asesinadas. Los comerciantes eran bastante ricos, no eran ciudadanos romanos, los colonos o siervos eran los agricultores de las tierras. Destacamos 2 aportaciones del mundo romano: la inteligencia, obras de ingeniería como el acueducto de Segovia, y el derecho romano, que es la base del derecho civil español.

Rutas o vías de comunicación de la península ibérica:

• Vía de la Plata:

  Carretera que comienza en Astorga, Salamanca, Mérida, Itálica y Sevilla.

• Vía Atlántica:

  Coruña, Santiago de Compostela, Vigo, Coimbra, Lisboa, Faro.

• Vía Norte:

  Coincide con parte del Camino de Santiago. Empieza en Tarragona, Zaragoza, Palencia, Astorga y Santiago de Compostela.

• Vía Mediterránea:

  Ampurias, Barcelona, Tarragona, Sagunto, Valencia, Santa Pola y Cartagena.

Hoy en día se siguen intercambiando productos con Roma, como en el pasado. La conexión de Roma con la Península Ibérica es a través de los principales puertos del Mediterráneo: Ampurias, Barcelona, Tarragona, Sagunto, Valencia, Portus Ilicantus (Santa Pola) y Cartagena.

Ruta de la Seda - China:

Es la conexión de caravanas que transportaban productos fabricados en China, atravesando todo Asia, hasta llegar al Mediterráneo Oriental (costas del Líbano e Israel). Transportaban productos muy buenos como sedas, porcelanas y objetos de laca. Los mantones de Manila son de seda china con motivos orientales como figuras humanas, crisantemos, pagodas y dragones. Transportaban estos productos a España en los siglos XVI y XIX. Inicialmente eran sedas bordadas a mano, el resto se ponía en España. Era una caravana compuesta por camellos que atravesaban Asia y se agrupaban para evitar robos. Las dos principales rutas (ida y vuelta) salían de China con productos y desde el Mediterráneo Oriental volvían con productos del Mediterráneo como pasas de Corintio, aceites de oliva y maquillajes. Los chinos inventaron el tejido de seda y la porcelana. La descripción de la ruta comienza en Xiam, pasando por Karakoum, bordeando el desierto de Taklaman, después la ciudad de Susa (Irán), Samarcanda (Uzbekistán) y atraviesan hasta Antioquia (Siria) para llegar al puerto del Mediterráneo Oriental. A veces seguían hasta Jaffa (puerto de Tel Aviv, Israel) o Alejandría (Egipto) o Estambul. También transportaban otros productos no chinos como perlas del océano Índico, seda india, rubíes de Birmania, joyas de plata indias, especias, plantas medicinales, drogas y opio. Marco Polo viajó dos veces por esta ruta en 1271 y 1275, pero su familia había viajado anteriormente a China. Escribió el libro “El tratado de las maravillas” donde relata su viaje y las maravillas visitadas en China. En conclusión, la ruta de la seda fue una ruta comercial y cultural que permitió conocer la geografía, astronomía y cultura de China, Mongolia, entre otros.

Ruta de las especias:

Es una ruta árabe-marítima donde se buscaba comprar y vender productos para obtener ventajas económicas. Viajaban hasta el sudeste asiático, donde adquirían los productos típicos de cada región. Comenzaba en China (Guangzhou) y continuaba hasta el este de Java, donde compraban especias. Seguían hacia el golfo de Bengala, hacia la ciudad de Calcuta, donde compraban sedas indias, algodón, joyas y maquillaje. Desde Calcuta viajaban hasta Sri Lanka, rica en té, pimienta, canela, anís y también tenían minas de diamantes. De Birmania traían rubíes y perlas del Índico. Continuaban bordeando la India hacia la península Arábiga, donde adquirían aceites esenciales como el aloe y el almizcle, además de plantas medicinales y opio de China. Transportaban los productos a los puertos de la península Arábiga, a veces a través del Mar Rojo y el Canal de Suez. Se desembarcaban los productos, se montaban a lomos de un dromedario y se llevaban hasta Port Said.

Edad Media y actividad económica en Europa y España (476-1492)

En el año 476 cae el Imperio Romano invadido por los bárbaros, dando comienzo a una época oscura. En los primeros años de la Edad Media, el comercio se ralentiza, al igual que la cultura (pérdida del conocimiento grecorromano). La estructura medieval se basaba en una pirámide jerarquizada: 1. Rey, el elemento más importante de la sociedad feudal. 2. Alta nobleza, obispos, arzobispos, duques, condes y miembros del alto clero. 3. Bajo clero, monjes y sacerdotes con feudos pequeños, barones, caballeros e hidalgos. 4. Campesinos libres o villanos, que vivían en tierras de los señores feudales y las trabajaban. 5. Siervos de la tierra, obligados a trabajar para el señor feudal. Existían diferentes tipos de dominios feudales, como la propiedad civil que otorgaba derechos a un héroe militar, pertenecer a una orden militar o mediante concesiones reales a determinadas órdenes religiosas. La relación de vasallaje unía a los campesinos con su señor feudal, que podía ser un aristócrata, un monasterio u orden religiosa. El campesino trabajaba la tierra y estaba obligado al pago del diezmo para el señor feudal. Surgió el derecho de Pernada, que tenía dos significados: el derecho que tenía el señor feudal sobre una pata de todo animal que sacrificara y la prima noche de bodas con su mujer. La Edad Media termina en 1492 con el descubrimiento de América y la expulsión de los judíos de la península ibérica, lo que tuvo graves consecuencias económicas.