El Novecentismo y las Vanguardias en la Literatura Española

EL NOVECENTISMO Y LAS VANGUARDIAS

La Generación del 14, también conocida como Novecentismo, designa a un grupo de escritores españoles que, cronológicamente, se encuentran entre el Modernismo, la Generación del 98 y la Generación del 27. Su objetivo primordial era renovar la literatura y el arte de la época distanciándose de lo sentimental (lo subjetivo intimista de la Generación del 98), ya que sobre todo les interesa la transmisión de ideas y por esta razón consideran el ensayo un género fundamental. José Ortega y Gasset destaca en la vida intelectual de la primera mitad del siglo XX. Fundó la Revista de Occidente, que fue una de las publicaciones europeas más prestigiosas de su tiempo. Para él, el arte debe deshumanizarse, convertirse en un juego intrascendente y alejarse de las masas, ser un arte de minorías. Esto lo expone en su obra La deshumanización del arte.

Narrativa

En narrativa, los escritores novecentistas comparten con la Generación del 98 su preocupación por el problema de España y por la forma y cuidado del lenguaje. Es novelista del Novecentismo Ramón Pérez de Ayala, autor de Tigre Juan, que sigue sobre todo la línea de Clarín (S.XIX). Es una novela intelectual, rica de ideas y centrada en la visión crítica de la realidad social española.

Poesía

En poesía, destaca Juan Ramón Jiménez, autor modernista en sus inicios y Premio Nobel en 1956. Se caracteriza por su deseo de desnudez poética, la atracción por lo popular y la presencia de lo biográfico en sus poemas. Para él, la poesía es una forma de vencer la imperfección del mundo y un medio para conocerse a uno mismo y a la realidad que nos rodea. Evoluciona desde un modernismo intimista en obras como La soledad sonora, hasta lo que él denomina poesía pura o desnuda, es decir, despojada de los adornos modernistas, como en Diario de un poeta recién casado. Su poesía es cada vez más difícil y hermética, como muestra su obra Dios deseado y deseante.

LOS MOVIMIENTOS DE VANGUARDIA

Los movimientos de vanguardia o ismos son el reflejo artístico de la agitación política y social vivida a principios del siglo XX (Primera Guerra Mundial -1914-, Revolución rusa -1917-).

Vanguardia es un término francés que proviene del lenguaje militar y se refiere a las tropas adelantadas de un ejército “avant garde” y refleja el carácter contestatario y agresivo de estos movimientos, que aunque presentan características diferenciadas, comparten otras:

• Creatividad y originalidad, por encima de todo les interesa lo innovador.
• Experimentación: buscan temáticas sorprendentes y nuevas formas de expresión.
• Rebeldía y provocación: intentan llamar la atención sobre su arte.
• Intención lúdica: evitan el sentido artístico trascendental (valor del arte por el arte).

Los principales movimientos de vanguardia son:

Futurismo

Creado por Marinetti, este movimiento rechaza radicalmente el pasado. Sienten atracción por las máquinas y rompen con la sintaxis haciendo desaparecer los signos de puntuación.

Dadaísmo

Fundado por el escritor rumano Tristan Tzara. Dadá hace referencia al balbuceo de un niño, renuncia al significado y busca la espontaneidad y la improvisación. Para los dadaístas el azar sustituye a la inspiración.

Cubismo

Tuvo más repercusión en pintura (Picasso) que en literatura. Lo creó Apollinaire, que intentó plasmar la realidad desde distintos puntos de vista y todos a la vez, a través de los caligramas, que son poemas pictóricos en los que la forma guarda relación con el significado.

Surrealismo

André Bretón, pretende expresar el funcionamiento del pensamiento sin el control de la razón, lo que se llama la escritura automática. Recibe la influencia del psicoanálisis de Freud, el interesa el subconsciente y los sueños, las asociaciones inconscientes. Se pone de moda la técnica llamada de los cadáveres exquisitos en la que varias personas escriben un mismo poema con el folio doblado, cada uno añade un verso nuevo sin ver lo que el anterior ha escrito.

VANGUARDIAS EN ESPAÑA

Los movimientos de vanguardia españoles reciben la influencia de Ramón Gómez de la Serna, figura esencial en la introducción del vanguardismo en nuestro país. Fue un escritor de gran personalidad, que incluso crea su propio movimiento, el “ramonismo”. Su creación más personal fueron las greguerías: frases breves en las que lleva a cabo asociaciones de imágenes líricas, metáforas ingeniosas y humorísticas:

“Para el caballo todo el campo es tambor”

“Los presos a través de la reja ven la libertad a la parrilla”

Los movimientos de vanguardia específicamente españoles son:

Ultraísmo

Busca constantemente la novedad. Incorpora elementos de diferentes ismos, del surrealismo, el futurismo, el dadaísmo, como el gusto por los temas tecnológicos o la asociación libre de ideas. Un autor ultraísta fue Gerardo Diego, de la Generación del 27.

Creacionismo

Se introdujo a través del poeta chileno Vicente Huidobro. Es un movimiento sobre todo lírico, que se basa en el rechazo a la imitación de la realidad. Intenta crear otra realidad, crear un mundo propio. Así el poeta es como un pequeño dios. Para Huidobro, autor de Altazor, “el poeta no debe ser instrumento de la naturaleza, sino que ha de hacer de la naturaleza su instrumento”.