El Neoclasicismo en Arquitectura: Juan de Villanueva y Francisco de Goya
Enviado por Programa Chuletas y clasificado en Arte y Humanidades
Escrito el en español con un tamaño de 5,89 KB
El Siglo XVIII: La Ilustración y el Neoclasicismo
El siglo XVIII fue una época de grandes cambios, marcado por la Ilustración en el pensamiento, el Neoclasicismo en el arte y el absolutismo en política. El hombre ilustrado se sentía protagonista de una época iluminada por la razón, la ciencia y el respeto a la humanidad. Este contexto histórico desembocó en acontecimientos cruciales que sentaron las bases del mundo actual: la independencia de Estados Unidos en 1776, la Revolución Francesa de 1789 y la Revolución Industrial con la mecanización de los procesos de manufacturación. La revolución política exigió el fin del absolutismo y exaltó la conciencia nacional, materializada en la creación de nuevos estados como Alemania, Italia y Grecia.
Arquitectura: El Neoclasicismo
Nacimiento y Características
El nacimiento del Neoclasicismo en el siglo XVII se corresponde con una revisión de los modelos sociales, económicos y políticos en Europa. Este cambio se debió a la difusión de las teorías de la Ilustración en todos los ámbitos de la vida. El pensamiento ilustrado pretendía acabar con la exaltación barroca, la personalización del poder y los excesos decorativos del Rococó. El Neoclasicismo (1750-1800) respondió a esta necesidad poniendo la arquitectura al servicio del racionalismo, el orden y la armonía.
Una de sus características principales fue la revisión de las culturas clásicas, donde se concluyó la preeminencia de lo griego sobre lo romano. La arquitectura inspirada en Grecia predominó, dando lugar a un nuevo estilo considerado como un resurgimiento del verdadero arte, de ahí su nombre.
Modelos e Influencias
Los modelos de edificios de Grecia, Roma e incluso Egipto y Asia Menor se convirtieron en referentes para los arquitectos de la época. Los modelos greco-romanos dieron lugar a una arquitectura monumental que reproducía el templo clásico para darle un nuevo sentido a la sociedad civil. Destacan arquitectos como Carl Gotthard Langhans con la Puerta de Brandeburgo en Berlín (1789) y Jacques-Germain Soufflot con la Iglesia de Sainte-Geneviève o Panteón de París (1757).
España: Juan de Villanueva (1739-1811)
Trayectoria
Juan de Villanueva, arquitecto de la corte española, estudió en Roma. En sus inicios, realizó remodelaciones y pequeños palacetes como la Casita de Arriba y la Casita de Abajo en El Escorial (1773) y la Casita del Príncipe en El Pardo (1784). Tras sus primeros proyectos para el Museo del Prado, fue nombrado arquitecto oficial de la corte (1785), lo que le permitió realizar obras tan significativas como la Academia de la Historia, el Oratorio del Caballero de Gracia o la reconstrucción de la Plaza Mayor de Madrid, culminando su trabajo en la gran obra arquitectónica del Museo del Prado. Trabajó para Carlos III y Carlos IV.
Obras Destacadas
La Casita del Infante
La Casita del Infante en El Escorial, también conocida como la Casita de Arriba, debe su nombre a Don Gabriel de Borbón, hijo de Carlos III. Se construyó entre 1771 y 1773 por Juan de Villanueva. Es una pequeña "villa" con jardines de estilo italiano dispuestos en terrazas descendentes, desde donde se disfruta de una de las más bellas vistas del Monasterio.
La Casita del Príncipe o de Abajo
La Casita del Príncipe o de Abajo fue edificada en 1772 por Juan de Villanueva para el Príncipe de Asturias, futuro Carlos IV. La composición arquitectónica de este edificio recuerda a la de su obra más célebre, el Museo del Prado en Madrid.
Observatorio Astronómico (1790-1846)
El Observatorio Astronómico presenta elementos singulares en la obra de Villanueva, así como conexiones con planteamientos anteriores. El elemento más excepcional en términos expresivos es el templete redondo de coronación.
Arco de Cuchilleros
El Arco de Cuchilleros es la puerta de acceso más famosa de la Plaza Mayor de Madrid, situada en la esquina suroeste. Su considerable altura se debe al gran desnivel existente entre la Plaza Mayor y la Cava de San Miguel. Juan de Villanueva lo construyó tras el incendio de Madrid en 1790, cerrando completamente la plaza y habilitando una serie de arcadas para su acceso.
Museo del Prado (1785-1819)
El rey Fernando VII reunió aquí las colecciones reales. Su fachada se articula en dos cuerpos: el inferior, ritmado por la alternancia entre arcadas y hornacinas rectangulares con esculturas; y el superior, una galería de columnas jónicas. La parte central de la fachada es un pórtico sobresaliente, definido por el orden jónico gigante y rematado por un gran relieve rectangular. Villanueva agrupó libremente los órdenes arquitectónicos, pero siempre con un criterio estético y proporciones armónicas.
Francisco de Goya y Lucientes (1746-1828)
Primeros Años y Formación
Francisco de Goya y Lucientes nació en Fuendetodos, Zaragoza, el 30 de marzo de 1746. Sus padres pertenecían a la clase media baja. En Zaragoza, Goya recibió sus primeras enseñanzas en el taller de José Luzán, donde conoció a los hermanos Bayeu, quienes serían importantes en su carrera. En 1763, Goya se trasladó a Madrid para formarse en la corte. Participó en el concurso de becas para viajar a Italia que otorgaba la Academia de San Fernando, sin éxito. Se instaló en el taller de Francisco Bayeu, quien le enseñó sobre luces, brillos y abocetado en la pintura. Durante cinco años, Goya permaneció en el taller, concursando sin éxito para obtener una pensión. Finalmente, decidió viajar a Italia por su cuenta. En 1771, se presentó a un concurso en Parma, donde obtuvo el segundo premio. Su estancia en Italia fue corta pero productiva.
Regreso a Zaragoza y Primeros Encargos
A mediados de 1771, Goya regresó a Zaragoza, donde recibió sus primeros encargos de temática religiosa con un estilo académico.