Manifiesto de la Junta Democrática: Un Llamado a la Democracia en España

Manifiesto de la Junta Democrática

Contexto Histórico

Este manifiesto, de carácter político, colectivo y público, fue escrito el 29 de julio de 1974 durante el declive del régimen franquista, con Franco hospitalizado. Su autor fue la Junta Democrática, una coalición de grupos políticos y personalidades que abogaban por un gobierno provisional para reestructurar el Estado y establecer un régimen democrático.

Objetivos Principales

El manifiesto presenta doce puntos clave que se centraban en:

• Ruptura del sistema franquista: Devolución de la soberanía a la sociedad española.
• Amnistía: Liberación de los presos políticos.
• Pluralismo político: Legalización de todos los partidos.
• Derechos laborales: Libertad sindical para los trabajadores.
• Libertad de prensa: Fin de la censura.
• Independencia judicial: Separación de poderes.
• Reconocimiento de la pluralidad regional: Respetando la unidad de España.
• Profesionalización de las Fuerzas Armadas: Neutralidad en política.
• Libertad religiosa: Separación de Iglesia y Estado.
• Elecciones libres: Con garantías democráticas.
• Integración europea: En las estructuras políticas, económicas y sociales.

Conclusión

El manifiesto buscaba una ruptura democrática y un cambio radical en el marco político español, abandonando las estructuras franquistas para instaurar un sistema democrático. Ante la decadencia del régimen, con el asesinato de Carrero Blanco, la tensión social y el nombramiento de Arias Navarro, la Junta Democrática propuso una ruptura pactada. Gracias a estos esfuerzos, Juan Carlos I asumió el mando y convocó a Adolfo Suárez para formar gobierno, iniciando la transición.

Conflictos Políticos Internos en los 50

Tras la represión de los cuarenta, surgieron protestas estudiantiles en la Universidad de Madrid. En 1957, ministros del Opus Dei accedieron al gobierno, desplazando a los falangistas. Estos tecnócratas impulsaron la reforma económica de 1959, que liberalizó la economía. La Ley de Principios del Movimiento Nacional de 1958 reafirmó los principios del régimen. La visita del presidente Eisenhower en 1959 marcó el fin del aislamiento internacional.

El Inmovilismo Político de los 60

A pesar de los cambios económicos y sociales, el inmovilismo político generó problemas:

• El Concilio Vaticano II propició el alejamiento de la Iglesia de Franco.
• Surgieron tensiones nacionalistas, con la creación de ETA en 1959.
• Aumentaron los conflictos laborales, con reivindicaciones políticas.
• El Contubernio de Múnich de 1962 criticó la falta de democracia en España.

Respuesta de Franco a la Oposición

Franco creó el Tribunal de Orden Público (TOP) para reprimir la oposición. La ejecución de Julián Grimau en 1963 generó protestas internacionales. Para mejorar su imagen, el régimen implementó cambios legislativos superficiales:

• La Ley de Prensa de 1966, que no supuso un avance significativo.
• La Ley Orgánica del Estado de 1966, sin cambios relevantes.
• En 1969, Franco designó a Juan Carlos de Borbón como su sucesor.