Literatura Española de Principios del Siglo XX: Modernismo, Generación del 98 y Más

Antonio Machado

La obra de Machado es la perfección de la lírica. Sus obras muestran la evolución de la poesía. Su estilo es sencillo. Machado escribió poesía, prosa, teatro… destaca como poeta. Su trayectoria se divide en tres etapas:

La Primera Etapa

Utiliza un modernismo simbólico. Destacamos la obra Soledades. Es una poesía intimista. Machado muestra su tristeza con el uso de símbolos. Habla consigo mismo. El tema es el tiempo. Es un estilo sencillo con una métrica muy variada.

La Segunda Etapa

Empieza con Campos de Castilla. Es un tiempo menos intimista y más histórico. Es una poesía descriptiva que nos enseña un paisaje real. Algunos poetas relacionan el paisaje y el alma.

La Última Etapa

Publicó Nuevas Canciones, una obra que puso al público triste ya que ven que es una obra de carácter irregular. Trata temas más existenciales.

El Teatro de Principios del Siglo XX

En el siglo XX son muy conocidos tres tipos de teatro. También se escriben obras renovadoras que no son bien recibidas por el público.

Alta Comedia o Comedia Burguesa

Presenta temas con críticas e ironía. Este tema se expresa de forma elegante. Destacamos a Jacinto Benavente.

Teatro Poético

En un principio era el teatro modernista, este teatro desvía hasta unas obras inspiradas en el drama romántico histórico. Destacamos a los hermanos Machado.

Teatro Costumbrista

El teatro costumbrista recrea ambientes/espacios pintorescos, con popularidad y un lenguaje puro. Otro teatro humorístico, es el que se basa en el astracán, que es un estilo que muestra su gracia con situaciones disparatadas y en diálogos absurdos.

Valle-Inclán

Escribe novela, poesía y teatro. La novela de Valle-Inclán es de estética modernista con las Sonatas. Termina el esperpento con El ruedo ibérico, que es una novela histórica a causa de su estética, un esperpento (gran caricatura de la corte isabelina). La poesía la encontramos en la obra Claves líricas.

El Teatro de Valle-Inclán

La obra El marqués de Bradomín es modernista. El período intermedio crea un teatro mítico, que enseña una Galicia rural. La última etapa dentro del esperpento, la tenemos en la obra Luces de bohemia. Es una nueva estética que se basa en la deformación, mezcla lo trágico con lo ridículo. Valle-Inclán muestra una España trágica-ridícula.

El Esperpento

Lo inventó Goya y Quevedo; es la imagen deformada que nos devuelven los espejos cóncavos. Busca la perspectiva que supere la risa y el dolor, y que impida la identificación sentimental del público de la obra.

Estética de Valle-Inclán

• Menciona lo chabacano (vulgar) con referencias épicas o mitológicas.
• La degradación de los personajes es causada por la animalización, la cosificación o la muñequización.
• Interrumpe la acción con detalles que contrastan lo trágico y lo grotesco.
• El habla caracteriza a los personajes.
• Las acotaciones abunda la frase nominal.

Miguel de Unamuno

Su obra gira en torno a sus preocupaciones regeneracionistas o existenciales. Predominan las ideas (reflexivas y filosóficas), con el objetivo de hacer reflexionar al lector mediante un estilo apasionado, ágil y muy expresivo. Destaca por sus ensayos. Unamuno escribió en todos los géneros, sus escritos ofrecen una gran unidad, por la repetición de unos temas y por su estilo personal. Los temas muestran su trayectoria vital:

• Su etapa juvenil destaca por la preocupación regeneracionista.
• Su etapa madura evoluciona hacia el tema existencial-religioso.

Tiene un estilo que busca la expresividad, por lo tanto tiene un tono apasionado, vivo y directo.

La Novela

La novela de Unamuno recoge sólo los temas que le preocupan, y elimina todo lo que no es esencial en un relato. Por eso vemos una novela densa, filosófica, esquemática y apasionada, (una nivola según el autor). Vemos en sus obras que suprime las alusiones al paisaje y las circunstancias que rodean a los personajes. Éstos a su vez manifiestan el conflicto existencial a través de los diálogos o monólogos interiores. Destacamos La tía Tula y San Manuel Bueno, mártir, también Niebla.

Ensayo

Unamuno es uno de los ensayistas más importantes, destaca por expresarse en un tono vehemente. Predomina en este género, la reflexión sobre España y las preocupaciones existenciales:

España

Aparece en sus libros de viajes y ensayos de tono más reflexivo. Critica la realidad española, y apuesta por la europeización y el progreso. Posteriormente, evoluciona hacia una postura espiritualista, abandonado la fe en el progreso y defendiendo la españolización de Europa.

El Tema Existencial

Desarrolla el conflicto entre el “ansia de la inmortalidad” que apoya la religión, la razón, que parece oponerse a este deseo.

José Martínez Ruiz (Azorín)

La obra de Azorín gira en torno al tema del tiempo, su fluir constante, fugacidad y, a la vez la permanencia de paisajes y sentimientos. El escritor evoca la realidad fugitiva en un tono triste y nostálgico, y realiza abundantes descripciones paisajísticas. El estilo de Azorín es un modelo de precisión y detalle. Su léxico es muy rico, e incorpora arcaísmos. La narración se reduce a la descripción de sensaciones y ambientes. Destacan sus obras La voluntad y Antonio Azorín.

Ensayos

En los ensayos culminan los rasgos más característicos de Azorín:

• La obsesión por el tiempo.
• La correspondencia entre el paisaje y su estado de ánimo
• La melancolía y las descripciones minuciosas y detallistas

Predominan dos temas: El paisaje y la crítica literaria.

Los ensayos sobre paisajes españoles reflejan la evolución ideológica del autor: En los primeros, critica aspectos políticos y de realidad española, en los posteriores, muestra su preocupación por la tradición cultural española.

Los ensayos de crítica literaria ofrecen su visión subjetiva de la literatura española.

Pío Baroja

Concibe la novela como el género que puede incluir todos los otros géneros. La escritura debe supeditarse a la vida y reflejarla con el estilo más claro y directo posible, destaca también por su pesimismo. Los personajes son seres asociales o rebeldes. Vemos hombres de acción que luchan para escapar de la mediocridad cotidiana, y otros personajes abúlicos que son incapaces de actuar. Los ambientes, suelen ser humildes, suburbiales. El estilo barojiano destaca por la sencillez, recoge la lengua viva y emplea un lenguaje antirretórico. Destacamos sus obras: La Busca y Zalacaín El aventurero.