Leon Battista Alberti: Arquitectura y Humanismo en el Renacimiento Italiano

Introducción

**Leon Battista Alberti**, perteneciente a la generación posterior a Brunelleschi y Ghiberti, fue un destacado humanista y arquitecto del Renacimiento. Su obra más influyente, *De Re Aedificatoria*, está dividida en diez libros, al igual que la obra de Vitruvio, con quien discute diversos temas. También es autor de *De Pictura* y *De Statua*.

Obras Destacadas de Alberti

Templo Malatestiano en Rímini

En Rímini, Alberti trabajó para Sigismondo Malatesta, quien ostentaba el poder. Sobre una iglesia franciscana medieval, Alberti creó una envoltura, una "piel" donde se enterraría a la familia Malatesta y a los humanistas de su corte. Realizó la fachada, aunque la parte superior no se terminó. Su intención era recuperar el mundo clásico con la idea del arco del triunfo, simbolizando el triunfo sobre la muerte. Este arco central se repite a los lados. En las fachadas laterales, aparecen nichos en arcos abiertos en el muro.

Palacio y Loggia Rucellai en Florencia

El Palacio y la Loggia Rucellai en Florencia están situados uno enfrente del otro, formando un conjunto arquitectónico notable. Este conjunto es un modelo en la remodelación de las ciudades renacentistas. El palacio tiene una planta irregular al estar encajado en la trama urbana. El alzado es mucho más equilibrado, con tres alturas y dos entradas. En la parte inferior, las hiladas de piedra son mayores y van disminuyendo de tamaño según se asciende. Sobre este paramento almohadillado, en la planta baja aparece un banco corrido. Los huecos menores en la planta baja dan un aspecto de fortaleza al palacio. Una serie de pilastras ordenan la fachada. Los espacios entre pilastras están en exacta proporción con el tamaño de los huecos. La línea de cornisas no coincide con la de forjado, mostrando cierta independencia con el interior. Un pequeño patio se encuentra en el interior.

Santa Maria Novella en Florencia

En Santa Maria Novella, también en Florencia, Alberti diseñó la fachada. Organizó un plano de fachada independiente, con órdenes corintios que sujetan un entablamento. El cuerpo superior, aparentemente simple, tiene gran importancia. Presenta el aspecto de una fachada de templo clásico, con pilastras, entablamento y frontón, todo proporcionado. Un gran óculo en el medio permite la entrada de luz. Se observa una bicromía, con paneles de mármol verde y blanco. Para solucionar la diferencia de tamaño entre el cuerpo superior e inferior, Alberti añadió dos elementos laterales llamados volutas.

Iglesia de San Andrés en Mantua

La Iglesia de San Andrés en Mantua es una iglesia medieval que fue remodelada, conservando solo el campanario. Alberti trabajó la fachada de manera independiente del interior. La planta es de cruz latina, y su innovación radica en la desaparición de las naves, creando una unidad espacial con capillas a los lados. La nave está cubierta por bóvedas de cañón sujetas por gruesos muros. La fachada recuerda a un templo clásico: pilastras, entablamento y frontón. Además del orden que sujeta el frontón, aparece un segundo plano con un orden corintio más pequeño. Tiene una fachada previa que no corresponde con el tamaño del interior, pero mantiene la proporción, con tres entradas en el espacio previo, al igual que en el interior. La bóveda de la nave necesita contrafuertes a los lados, que son las paredes de las capillas. Tras pasar la primera fachada, aparecen bóvedas de cañón con casetones y motivos que recuerdan a la antigüedad. En la fachada principal, se destaca el arco central y tres huecos a cada lado.

Iglesia de San Sebastián en Mantua

También en Mantua, se encuentra la Iglesia de San Sebastián. Este edificio ha sido muy restaurado y muchas zonas quedaron sin terminar. El acceso se realiza por dos escaleras laterales. Es característica su planta, situada sobre una cripta.