Historia del Estado: Evolución, Tipos y Teorías
El Estado
El Estado es la institución política a la que se le reconoce la autoridad para mantener el orden y asegurar la libertad y el bienestar de las personas que viven en un territorio determinado. Se ocupa de asuntos públicos y goza de legitimidad. En cada sociedad existe el consenso de que solamente el Estado puede mantener el orden dictando leyes y asegurándose de que todos las respeten. La forma en que las comunidades o sociedades organizan esa autoridad se llama organización política.
Elementos que componen el Estado:
- Un territorio, delimitado por límites internacionales.
- La población.
- El gobierno, representado por una persona o un grupo de personas que se encargan de dictar las normas y controlar que se respeten.
- El derecho, que es el conjunto de normas que organizan la sociedad.
- Un aparato político administrativo, integrado por los funcionarios y el personal de los ministerios, los tribunales de justicia, las fuerzas de seguridad, etc.
- La soberanía.
Estado Moderno y Capitalismo
Entre los siglos XI y XIII, en Europa predominó el feudalismo, una forma de organización de la sociedad. El territorio, que pertenecía a los reyes, estaba fraccionado en feudos que eran concedidos a los señores para su beneficio. Los siervos eran campesinos que no tenían la libertad de abandonar las tierras del señor a quien debían obedecer. Estos campesinos se dedicaban a la agricultura para producir alimento para ellos y para el señor, quien les garantizaba protección.
En el siglo XIV, el occidente europeo sufrió una grave crisis que dio lugar a un proceso de profundos cambios en la economía y la sociedad, que se consolidarían recién en los siglos siguientes:
- La agricultura dejó de ser de subsistencia: se producía más de lo que se consumía.
- Se desarrolló el comercio.
- Comenzó a cobrar importancia la propiedad privada.
- Se perfeccionaron instrumentos y máquinas que favorecieron el desarrollo de la manufactura.
- Los nuevos talleres empleaban a los antiguos campesinos, que cobraban un salario a cambio de su trabajo.
- Los comerciantes y los dueños de los talleres conformaron una nueva clase social: la burguesía.
Este proceso de transformaciones, que se extendió durante varios siglos, significó el nacimiento de un nuevo sistema económico conocido como capitalismo.
Una de las características centrales del feudalismo era la dispersión del poder político. En cada feudo, los señores dictaban leyes y aplicaban justicia, imponían y recaudaban los tributos que debían pagarles los campesinos y formaban ejércitos. El debilitamiento del sistema feudal implicó la pérdida de poder político de los señores. Al mismo tiempo, se inició un proceso de concentración de poder por parte del rey. Así, la organización política feudal fue reemplazada por el Estado moderno. España, Francia e Inglaterra iniciaron este proceso de concentración de la autoridad. Estos nuevos Estados tuvieron como funciones principales proteger la propiedad privada y los privilegios de la nobleza, y controlar a los sectores populares. En las ciudades, el fortalecimiento de la autoridad real también benefició a la burguesía.
El Gobierno
Es la acción de dirigir el Estado, el conjunto de cargos y funciones de los tres poderes: ejecutivo, legislativo y judicial. Estas acciones son realizadas por los gobernantes: el grupo de personas designadas para tomar decisiones y dictar leyes.
Teorías sobre el Estado
Hobbes:
A mediados del siglo XVII, preocupado por la guerra civil en su país, escribió Leviatán, en la cual imaginó una situación en la que los hombres vivían sin una autoridad, no había leyes ni gobierno; este era el estado de naturaleza. Cada uno era libre de actuar y usar la fuerza como le convenía y, según Hobbes, tanta libertad llevaba a una guerra de todos contra todos. Para salir de esa situación, los hombres debían suscribir un contrato social: un acuerdo por el que renunciaban a su voluntad individual y la cedían a un poder central: el Estado. Hobbes da a ese Estado el nombre de Leviatán y lo imagina como un Estado monárquico. El monarca asume la tarea fundamental de garantizar la convivencia pacífica entre los hombres.
Locke:
John Locke, uno de los fundadores del liberalismo, sostenía que el estado de naturaleza era una situación pacífica, donde los hombres gozaban de derechos naturales: a la vida, a la propiedad privada y a la libertad. Cuando surgían conflictos, podían evitarlos realizando un contrato social entre ellos y con el soberano: cediendo al soberano el poder de gobernar a cambio de que este protegiera la libertad, la vida y las propiedades de las personas. Locke planteó la necesidad de dividir en tres el poder político: el poder legislativo, que dictaba las leyes; el poder ejecutivo, que las aplicaba; y el poder federativo, que representaba al Estado frente a los demás Estados.
Marx:
Karl Marx, cuyo pensamiento dio origen al marxismo, criticó el capitalismo y el Estado moderno. Sostenía que el Estado, al preservar la propiedad privada, mantenía la división de clases sociales existentes en las sociedades capitalistas. Para el marxismo, las clases sociales son la burguesía, propietaria de los medios de producción, y el proletariado, que solo posee su capacidad de trabajo. En este esquema, el Estado es un instrumento que utiliza la burguesía para someter al proletariado. La solución es tomar el Estado por la fuerza y eliminar la propiedad privada, primero, y después desarrollar en la gente una forma de pensar y de vivir que convierta al Estado en innecesario. A esta sociedad ideal, Marx la denominó comunismo.
El Estado de Derecho
La idea de Estado de derecho se impone a partir de la Revolución francesa y de las revoluciones americanas de fines del siglo XVIII como reacción a las monarquías absolutas. Es un Estado que está organizado y funciona de acuerdo con la ley y no según las decisiones arbitrarias de una persona, un rey absolutista o dictador. La principal ley a la que se somete un Estado de derecho es la Constitución.
Los principios sobre los que se basa el Estado de derecho son:
- Igualdad jurídica: todos somos iguales ante la ley.
- Protección de derechos fundamentales del hombre: libertad, propiedad y seguridad.
- División de poderes: para evitar la acumulación de autoridad, esta se organiza en tres poderes: legislativo, ejecutivo y judicial.
Lo opuesto al Estado de derecho es el Estado de hecho o de facto. Un Estado de facto puede reemplazar a un Estado de derecho mediante un golpe de Estado, que son movimientos de fuerza, efectuados casi siempre por las fuerzas armadas, para derribar al gobierno y desconocer el orden constitucional.
El Estado Nacional
Estado y nación son cosas diferentes: nación hace referencia a la comunidad de origen. Una nacionalidad puede definirse de acuerdo con el idioma, la religión o las costumbres que practica cada sociedad. Aquello que nos da identidad tiene que ver con reconocer un pasado en común, con la voluntad de vivir juntos y de compartir un mismo proyecto.
A diferencia de un Estado, que puede crearse de un día para el otro, la formación de una nación puede tardar siglos en construirse.
La relación que hay entre Estado y nación es que los grupos nacionales tienden a organizarse en Estados, pero puede haber:
- Naciones sin Estado propio.
- Estados integrados por varias naciones.
Estados Federales y Estados Unitarios
El Estado siempre es la autoridad suprema dentro de los límites de un territorio, pero esa autoridad puede estar organizada de dos maneras:
- El Estado federal: coexisten dos niveles de autoridad: uno central, de todo el territorio, y otro provincial que se limita a las provincias. Cada provincia es autónoma, pero están limitadas a respetar lo establecido por la Constitución Nacional.
- El Estado unitario: en este solo hay una autoridad central; puede haber provincias, pero no son autónomas.
Estado Liberal
El liberalismo surgió entre los siglos XVII y XVIII, se basa en los principios de la libertad, la seguridad física y la propiedad privada. En el siglo XIX se conformaron los Estados liberales, que se organizan como un Estado mínimo que debe reducir al máximo su intervención, y el Estado se limitaba a las reglas del mercado, que eran: la competencia económica y el libre intercambio. Las principales funciones del Estado liberal son brindar las condiciones para que el mercado funcione y resolver las cuestiones que el mercado no atiende.
Estado de Bienestar
Es un Estado que interviene activamente en el ámbito económico-social promoviendo el desarrollo para mejorar la calidad de vida y disminuir las desigualdades sociales. Interviene en:
- La economía: hay libre mercado, pero el Estado lo regula. Se estatizaron empresas de servicios públicos. Se protegió el mercado interno de cada país para alentar el desarrollo.
- Lo social: busca garantizar que todas las personas gocen de los derechos económico-sociales.
- Lo laboral: legisla para dar más beneficios a los trabajadores, fija un salario mínimo y da una indemnización por despido.
Los Estados de bienestar gastaban demasiado y, en consecuencia, provocaban la inflación.
El Estado Neoliberal
A principios de los años 70, el manifiesto de la crisis del Estado de bienestar hizo que resurgieran las ideas liberales con el nombre de neoliberalismo, con el agregado de que el Estado solo debería ocuparse de garantizar el orden y la propiedad privada. Para retirar la intervención del Estado, se inició un proceso de reformas que consistió en:
- Desregulación de la economía: se vuelve un libre mercado sin restricciones.
- Privatizaciones: se privatizan las empresas de servicios públicos y otras demandas (salud, educación, etc.).
- Flexibilización laboral: se permiten formas de contratación con menos exigencias para las empresas y mayor protección de los empleados.
Asegurar el ejercicio de los derechos económico-sociales dejó de ser prioridad para el Estado, pero para evitar conflictos sociales, el Estado debió asistir a los sectores excluidos.
El Estado Argentino: Un Poco de Historia
Durante las décadas que siguieron a la Revolución de Mayo de 1810 se produjo una fuerte dispersión del poder político. Los caudillos controlaban las provincias y no aceptaban someterse a una autoridad central.
No había un Estado nacional, de derecho en nuestro país porque:
- No había una central legítima.
- No se contaba con una Constitución que organizara la autoridad.
- No se controlaba totalmente el territorio.
- No había una población que se identificara a sí misma como "argentina".
Después de la batalla de Caseros, en 1852, estarían dadas las condiciones para poner en marcha el proyecto.
Un Congreso General Constituyente, en mayo de 1853, sancionó la Constitución Nacional, pero Buenos Aires no la aceptó. La unificación definitiva se produjo en 1862.
El nuevo gobierno central hizo cumplir la Constitución Nacional, unificó el territorio nacional, extendió el aparato administrativo, pobló el territorio, formó una identidad nacional y consolidó el modelo económico agroexportador: de acuerdo con las ideas liberales, el gobierno nacional promovió el intercambio económico de nuestro país con el extranjero.