Filosofía de Kant: Conocimiento, Ética, Libertad y Contrato Social
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Comparación entre Kant y los Ideales de la Ilustración
Immanuel Kant se identificó con los ideales de la Ilustración europea: la razón y el progreso. En su artículo, escribe que el lema de la Ilustración es: ”Atrévete a pensar por ti mismo”. La emancipación del ser humano por medio de la razón es el programa de la Ilustración, forma parte de los ideales de la Revolución Francesa y es también el núcleo del proyecto filosófico de Kant.
Kant señaló que la filosofía puede reducirse a tres preguntas fundamentales:
- ¿Qué puedo saber?
- ¿Qué debo hacer?
- ¿Qué me está permitido esperar?
El Saber: La Crítica de la Razón Pura
Kant se ocupa del conocimiento en la Crítica de la Razón Pura. Aspira a superar el escepticismo, sobre todo en lo referente a la Física. Para ello, intenta resolver la oposición entre racionalismo y empirismo.
- Racionalismo: Nuestro conocimiento tiene su origen en la razón y la metafísica.
- Empirismo: El origen y el límite de nuestro conocimiento es la experiencia y, por ello, la metafísica es imposible y las leyes de la física son meras creencias contingentes.
La solución kantiana consiste en afirmar que solo hay conocimiento cuando a los elementos racionales del conocimiento se les suma la experiencia sensible. De este modo, Kant sitúa como modelo la física de Newton, ejemplo de razón matemática y experiencia, y excluye del conocimiento a la metafísica dogmática.
El Deber y el Imperativo Categórico: La Crítica de la Razón Práctica
Kant se ocupa de la moral en su obra Crítica de la Razón Práctica. Busca corregir el relativismo de la ética de Hume. Para ello, distingue dos clases de moral: la material y la formal.
- Moral Material: Sus imperativos nos dicen qué tenemos que hacer, la norma que hay que seguir y qué fin obtendremos si actuamos de ese modo. Un ejemplo aristotélico: “Si quieres ser feliz, entonces debes elegir siempre el término medio”. Kant considera que fueron incapaces de fundar deberes universales. El imperativo solo obligaría a los que aceptan el fin, no a los que no lo acepten como algo deseable.
- Moral Formal: No contiene imperativos materiales. Contiene un único imperativo que ni propone un fin ni te dice lo que tienes que hacer. “Obra solo según una máxima tal que puedas querer al mismo tiempo que se torne ley universal”. Según Kant, para que algo sea un deber moral debe ser universal.
Racionalismo vs. Empirismo
Según el empirismo, el origen del conocimiento es la experiencia, mientras que para el racionalismo es la razón. Según el racionalismo, a partir de las ideas innatas, el conocimiento avanza de forma necesaria y a priori. Para el empirismo, la mente es como una tabla rasa y, por tanto, toda idea que se pueda encontrar en ella procede de la experiencia.
Según el empirismo, el conocimiento humano tiene límites, mientras que el racionalismo tenía una confianza absoluta en los poderes de la razón para conocerlo todo. El racionalismo buscaba un método que unificara el saber tomando como modelo a la ciencia moderna en su aspecto matemático, mientras que el empirismo, inspirándose en la física de Newton, habría recogido la importancia de la experiencia.
Empiristas y racionalistas defienden el fenomenismo, lo que directamente conoce la mente son sus ideas y pensar se reduce a relacionar ideas entre sí. El fenomenismo conduce al clásico cuestionamiento de la existencia del mundo externo.
- Descartes: Recurre a Dios como garantía de la existencia del mundo externo.
- Locke: Considera absurdo demostrar determinadas cosas y da por supuesto que nuestras ideas primarias son una copia exacta del mundo real.
- Hume: Entiende que la única garantía del mundo es el hábito que procede en nosotros, la coherencia de nuestras percepciones, así como su valor de supervivencia.
La Libertad en Kant
Kant concluye que se puede demostrar tanto que somos libres como que todo está determinado. La única explicación de esto es que el determinismo es lo propio del fenómeno, mientras que la libertad es lo propio del noúmeno. La libertad queda fuera de los límites del saber humano, tal como otras ideas de la razón, como la idea de Dios.
En la Crítica de la Razón Práctica, la libertad aparece como un postulado. La libertad es un postulado en el que es imposible demostrarla, pero si no la suponemos, toda nuestra vida moral se vuelve un sinsentido, pues no podríamos atribuir a nadie responsabilidad ni culpa.
En términos políticos, la libertad es para Kant y Rousseau un derecho natural que corresponde a todo individuo. Kant defiende la libertad política positiva, por la cual cada individuo se convierte en colegislador. En este punto, Kant se aparta de Hobbes y se acerca a la idea de autolegislación presente en el concepto de voluntad general de Rousseau. El gobernante debería legislar como si fuera posible que la voluntad única del pueblo diera su consentimiento a las leyes.
El concepto de libertad jurídica no expresa desobediencia civil, puesto que Kant, al igual que Hobbes, consideraba que la sumisión al poder del Estado era una condición necesaria para el orden social.
El Imperativo: Máximas y Leyes Prácticas
Kant se ocupa de la moral en su obra Crítica de la Razón Práctica. Dos tipos:
- Máximas: Principios subjetivos de acción.
- Leyes Prácticas: Son principios objetivos y universales, válidos para todos.
Las leyes morales se hallan del lado del deber moral. Según Kant, el deber moral es un hecho del que cualquiera es consciente. Solo somos libres cuando obedecemos a la ley moral que dicta el deber. En cambio, la libertad pertenece al campo del deber y pertenece al reino de la cosa en sí, del alma.
Según Kant, a la hora de valorar una acción hay que atender exclusivamente a la intención y nunca a las consecuencias de la misma. No hay nada bueno ni malo en el mundo, salvo una buena o mala voluntad. Una voluntad es buena cuando la guía una buena intención, y una intención es buena cuando busca cumplir el deber por respeto al deber y no por las consecuencias de la acción.
Kant distingue entre obrar por respeto al deber y obrar conforme al deber. Obrar conforme al deber es, por ejemplo, “no robar” por miedo al castigo. Sin embargo, la moral nos exige obrar por respeto puro al deber. Es el reino de la moralidad.
El Giro Copernicano en la Filosofía de Kant
Es el cambio radical que establece el proceso del conocimiento. El conocimiento es un proceso entre el hombre y el mundo en el que el hombre capta el mundo y lo interpreta. Percibimos la realidad porque la captamos a través de los sentidos y a través del tiempo y el espacio, y nosotros explicamos la realidad porque la relacionamos mediante la causalidad que está en nosotros y no en las cosas.
El conocimiento es una intersección entre el sujeto y el objeto; quien determina el conocimiento del mundo es el sujeto. Si los filtros fueran otros, nuestra comprensión del mundo sería diferente.
Copérnico dio la vuelta a la imagen del universo, un giro radical en la interpretación del movimiento de los astros. El sentido común nos dice que conocemos la realidad porque nos hacemos una imagen objetiva de las cosas. Por el contrario, Kant dice que es imposible conocer las cosas tal cual son porque nosotros influimos inevitablemente en ellas.
La Ilusión Trascendental
Pretende conocer noúmenos. Los fenómenos son los sucesos de la naturaleza, son objetos fuera de mí, pero no son independientes de mí. Los noúmenos, el alma o Dios, son objetos que están fuera de mí y son independientes de mí, puesto que no puedo abarcarlos con los sentidos. Los noúmenos son objetos puros y los fenómenos objetos de conocimiento; solo podemos conocer fenómenos, los noúmenos son incognoscibles. Los noúmenos se desprenden de nuestra vida moral.
- Que seamos libres: Sin libertad no tendríamos vida moral, la libertad tiene que existir.
- Que haya en nosotros algo universal y eterno: Ese algo universal y eterno que tiene que existir dentro de nosotros es el alma, el alma es un noúmeno.
- Que los ideales que nos mueven en la vida moral puedan hacerse realidad: Siempre hay una fisura entre lo real y lo ideal.
En Dios se unen lo existente y lo perfecto. Dios tiene que existir para llevar a cabo la vida moral. Dios es un noúmeno. Si el espacio, el tiempo y las categorías son las condiciones que hacen posible que conozcamos, la libertad, el alma y Dios son las condiciones que hacen posible que actuemos.
El Contrato Social en la Filosofía Kantiana
Permite a los individuos salir del estado de naturaleza para entrar en el estado civil. Es una hipótesis que nos dice cómo debe ser administrado el Estado. El contrato social es propio de una constitución republicana si implica la igualdad absoluta de los individuos ante una autoridad, lo cual acerca el pensamiento kantiano a Hobbes y, al mismo tiempo, garantiza la libertad en tanto que el individuo es colegislador. El gobernante tiene que dictar las leyes como si emanasen de la voluntad general, lo cual aproxima el pensamiento de Kant a Rousseau. El contrato social originario ha de respetar también el principio de ciudadanía. Al contrario que Rousseau, para quien todos los hombres son ciudadanos, Kant distingue entre ciudadanos activos y pasivos siguiendo el criterio de posesión de tierras.