Estrategias de Planificación y Puesta en Escena para la Narrativa Visual

Se encuadrará tan próximo como sea posible, y la acción lo justifique, para destacar detalles importantes. El plano general se limitará al máximo, no debiendo emplearse apenas más que para:

• Amplios movimientos físicos (peleas, deportes).
• Establecer la "geografía" de la acción (plano de situación) mostrando la ubicación de los distintos sujetos de la acción y su relación/situación en el escenario.

El plano habitual será el plano medio y el primer plano, y con ellos acentuaremos el dramatismo de la situación. El plano americano o plano general corto será útil en los momentos de no clímax dramático.

Se tendrá en cuenta la necesidad de planos de recurso para la fase de edición o ajuste de postproducción.

En aquellas realizaciones multicámara para las que se prevea una fase posterior a la grabación de edición, es posible planificar ciertas tomas de inserto que faciliten emplazamientos de cámara de difícil ejecución durante el desarrollo del bloque o que sirvan para ajustar el ritmo y duración definitivo. A este efecto es normal "doblar" o "masterizar" alguna cámara, es decir, grabar su señal completa, con lo que se dispondrá en la edición de múltiples planos posibles para usar como recurso.

Proceso de trabajo de la planificación:

1. Se procederá al estudio y planteamiento del movimiento de los actores sobre el decorado y a la justificación de los elementos de ambientación cuyo emplazamiento debe responder a un criterio de lógica, pero a la vez con un criterio dramatúrgico: los objetos de ambientación son parte de la acción.
2. Habrá que buscar motivaciones para que los actores se muevan con lógica cortando su pasividad; los elementos de ambientación pueden desempeñar un papel importante. Es muy conveniente durante los ensayos, y antes de disponer de un decorado definitivo, estructurar el decorado al servicio de los actores, adecuándolo a su movimiento y justificación interpretativa.
3. Una vez resuelto el movimiento escénico habrá que estudiar el emplazamiento de cámaras y jirafas, para lo que es conveniente disponer del plan de iluminación. Al tiempo que se procede a estudiar los posibles tiros de cámara es oportuno proceder a la determinación de los encuadres en función de los puntos de vista desde los que vaya a seguirse la acción. Esta operación responde a criterios subjetivos del realizador o de rutina narrativa. Aunque en ocasiones, no se hacen los planos deseables, sino los posibles; así pues, lo primero que deberá hacerse es determinar los planos de mayor importancia, las imágenes clave para proseguir resolviendo emplazamientos en orden de importancia.

En todo caso, la planificación no debe destacar sobre la historia; debe pasar desapercibida. El fin principal deberá ser contar una historia evitando que el protagonismo del encuadre o la composición oculte o distraiga la historia.

El único criterio para decidir el plano y el modo de hacerlo es valorar qué es lo importante para la historia.

1. ¿Qué imagen, qué objeto, qué sujeto...?
2. ¿Qué y cómo queremos destacar la historia?

Proceso de puesta en imagen (montaje dramático en TV):

Como ya hemos sugerido, el proceso de planificación con frecuencia está ligado al proceso de interpretación y de puesta en escena y, sin duda, son inconcebibles el uno sin el otro.

Guion literario o texto:

Cualquiera que sea su procedencia, lo primero será proceder a una revisión y adecuación del texto. Si proviene de una obra de teatro no debe cambiarse el diálogo; si fuera un guion original es más factible siempre y cuando intervenga el guionista en las modificaciones.

Estudio y adaptación del texto:

La adecuación al medio televisivo reclama la diversidad espacial; por tanto, si pueden y deben diversificarse los escenarios. Los que para el autor teatral fueron recursos inevitables de la dramaturgia teatral, en televisión deben tener un tratamiento diferente, modificando descripciones de acciones que sucedan fuera de la escena, ya que en el medio televisivo pueden y deben ser mostradas, generalmente nos veremos obligados a pequeños retoques en el guion.

Movimiento de los actores:

En el teatro los actores se mueven en horizontal, en televisión eso provocaría que atravesaran el cuadro rápidamente, los movimientos en vertical o en el eje de cámara, provocan con facilidad el que los actores se "enfilen". Así pues, en definitiva, el movimiento más adecuado es un movimiento en diagonal respecto al eje del otro actor.