Enfermedades Infecciosas: Origen, Mecanismos y Tratamientos

Enviado por Programa Chuletas y clasificado en Medicina y Salud

Escrito el en español con un tamaño de 10,43 KB

Enfermedades Infecciosas: Un Panorama General

Algunas enfermedades mortíferas son nuevas, pero la mayoría han existido a lo largo de la historia. Podemos clasificarlas en:

Enfermedades Emergentes

Desde la aparición del SIDA (1983) hasta el SRAS (2003), el ritmo al que surgen nuevas enfermedades es de aproximadamente una por año. Estas enfermedades son transmitidas por gérmenes hasta ahora desconocidos. Algunos permanecieron confinados en su lugar de origen antes de entrar en contacto con las personas. Otros casos se deben a mutaciones que los han convertido en peligrosos para la especie humana.

Enfermedades Reemergentes

Estas enfermedades azotan regiones del planeta en las que ya se creían erradicadas:

  • El cólera: Volvió en América del Sur después de un siglo de ausencia.
  • La tuberculosis: Regresó en Europa del Este y en el África subsahariana.
  • El dengue: Se limitaba al Sudeste Asiático, pero se propagó en los últimos años del siglo XX al continente americano.
  • La malaria: Ha emergido en nuevas áreas y regresado a zonas donde ya se creía erradicada.

Otras enfermedades incluyen: Hantavirus, viruela del simio, leptospirosis, peste y fiebre amarilla.

Epidemia: Afecta a una región geográfica durante un tiempo limitado. Pandemia: Afecta a muchos países en el mundo al mismo tiempo.

La Teoría Microbiana de la Enfermedad

A mediados del siglo XX, investigadores como Louis Pasteur establecieron la relación entre el desarrollo de ciertas enfermedades y la presencia de microorganismos en el enfermo. Sin embargo, no se establecía que estos fueran la causa. Robert Koch puso a prueba experimentalmente la teoría microbiana de la enfermedad. Después de muchos experimentos, comprobó que cada enfermedad está producida por un microorganismo determinado, y cada microorganismo genera una enfermedad diferente.

Los Postulados de Koch

Son los requisitos básicos para que una enfermedad se considere infecciosa:

  1. El microorganismo debe estar presente en todos los individuos con la misma enfermedad.
  2. El microorganismo debe ser recuperado del individuo enfermo y poder ser aislado en un medio de cultivo.
  3. El microorganismo proveniente de ese cultivo debe causar la misma enfermedad cuando se inocula a otro huésped.
  4. El individuo experimentalmente infectado debe contener el microorganismo.

Agentes Infecciosos

Los microorganismos patógenos producen enfermedades infecciosas, aunque algunos agentes causantes de enfermedades no son organismos. Los agentes infecciosos son parásitos que invaden el cuerpo de un ser vivo y se reproducen en su interior o sobre él, ocasionando daños en sus tejidos. Estos daños son los responsables de los síntomas.

Los agentes infecciosos pueden ser:

  • Virus: Parásitos celulares que necesitan introducirse en las células para poder reproducirse. Son difíciles de eliminar si no se destruyen las células donde viven (ejemplos: SIDA, SRAS).
  • Bacterias: Organismos unicelulares procarióticos que pueden reproducirse sin invadir otras células (ejemplos: tuberculosis, cólera).
  • Protozoos y Hongos: Protozoos unicelulares eucarióticos y hongos unicelulares o pluricelulares, englobados en el término parásitos (ejemplos: paludismo, enfermedad del sueño).

La Respuesta del Organismo ante la Infección

Los seres vivos infectados por un germen patógeno se consideran fuentes de infección. Los gérmenes pueden pasar de las fuentes de infección a un organismo sano de dos formas:

  • Transmisión directa o contagio: Se produce por contacto directo entre la persona sana y la enferma (ejemplo: la gripe).
  • Transmisión indirecta: Los gérmenes de la fuente de infección pasan al medio y de allí pueden transmitirse a una persona sana (ejemplo: el cólera).

Los reservorios son los animales que albergan agentes infecciosos para la especie humana.

La Respuesta Inmunitaria

Nuestro organismo tiene barreras naturales que dificultan la entrada de los agentes infecciosos. Si estos consiguen superar esta barrera, deberán enfrentarse al sistema inmunitario. Esta respuesta suele eliminar los gérmenes causantes de la enfermedad. Los glóbulos blancos son el componente central.

Tipos de glóbulos blancos:

  • Fagocitos: Engloban los cuerpos extraños y los digieren.
  • Linfocitos: Hay dos tipos: el B, que fabrica anticuerpos, y el T, que destruye células infectadas por virus o cancerígenas.

Memoria Inmunitaria e Inmunidad

La primera vez que un cuerpo se expone a un agente infeccioso, existe un lapso antes de un aumento de anticuerpos y linfocitos T. Después, el sistema inmunitario “recuerda” a ese germen y se vuelve inmune a él. Gracias a la capacidad de memoria del sistema inmunitario, se proporciona una inmunidad natural. También existe la inmunidad artificial, que se logra introduciendo en el cuerpo patógenos enteros que ya han perdido la capacidad de estimular la respuesta del sistema. Esto se llama vacunación.

Antígenos: Son organismos o moléculas que son reconocidos por el sistema inmunitario y estimulan su respuesta.

Anticuerpos: Son proteínas fabricadas por los linfocitos que se vierten en el plasma sanguíneo, donde se unen al antígeno particular para el que han sido producidos e inician su destrucción.

Medicamentos contra las Infecciones

Los Antibióticos

Los antibióticos son sustancias químicas de origen biológico o sintético que matan las bacterias o impiden su multiplicación. Alexander Fleming descubrió la penicilina en 1929, al observar que un hongo (Penicillium notatum) impedía el desarrollo de la bacteria Staphylococcus aureus. Se han descubierto otros antibióticos producidos por seres vivos o fabricados en laboratorios, denominados antibióticos sintéticos.

Los Antivirales

Los antivirales se utilizan para las enfermedades infecciosas no bacterianas, como las causadas por virus, hongos o protozoos. La importancia de algunas enfermedades víricas, como el SIDA, ha impulsado el desarrollo de medicamentos antivirales. Sin embargo, no es sencillo lograr que un medicamento acabe con una infección vírica, ya que los virus no son células, sino que se reproducen en su interior. Los fármacos antivirales están destinados a evitar que el virus entre en las células y a que, tras su reproducción, no puedan liberarse o contagiar a las células vecinas.

Resistencia a los Medicamentos

Un factor que está influyendo en la emergencia y reemergencia de enfermedades infecciosas es la creciente resistencia de las bacterias a los antibióticos:

  • Por mutación: Su información genética cambia de forma espontánea y al azar.
  • Por intercambio de genes entre especies bacterianas. Si un tipo de bacteria adquiere la resistencia a un medicamento, puede pasársela a otra bacteria.
  • Por automedicación.

Ambos son fenómenos naturales y no pueden evitarse. La selección y propagación de las variedades bacterianas más resistentes, en cambio, sí es evitable, ya que se producen por:

  • Tratamientos inadecuados: Prescripciones de antibióticos tanto excesivas como insuficientes.
  • Utilización de antibióticos en plantas y otros animales: Antibióticos destinados a combatir enfermedades infecciosas en las personas se utilizan para tratar infecciones en plantas y animales. Es frecuente que los mismos microbios circulen entre sus huéspedes, lo que les brinda la oportunidad de intercambiar genes.

Nuevos Medicamentos

La necesidad de fármacos más eficaces mantiene en permanente actividad a los laboratorios de investigación y a las empresas farmacéuticas. Solo uno entre 10,000 compuestos probados llega al mercado. Un nuevo compuesto tiene que superar dos etapas antes de ser autorizado:

Etapa Preclínica (Investigación y Desarrollo)

Se estudian sustancias naturales, se diseñan nuevas moléculas y se someten a pruebas para descubrir si tienen alguna actividad de interés. Se comprueba que funcionan bien y que no son tóxicas. Se realizan experimentos in vitro e in vivo con animales.

Etapa Clínica

Se realizan pruebas con personas:

  • Fase I: Con grupos pequeños de voluntarios sanos, se comprueba que no se produce ningún efecto perjudicial.
  • Fase II: Con un grupo pequeño de pacientes enfermos sin otro tratamiento, se quiere comprobar la eficacia y la dosis adecuada.
  • Fase III: Con un grupo mayor de enfermos, se comparan los resultados con otros grupos tratados con otros fármacos.

Si se demuestra que el medicamento cumple los requisitos, entra en el mercado. La comercialización se mantiene bajo vigilancia por si aparecen efectos adversos.

Patentes y Genéricos

Las patentes para las empresas farmacéuticas son un seguro para recuperar la inversión realizada en el descubrimiento. Para los pacientes de países pobres, conseguir medicamentos que curen sus enfermedades es muy difícil, ya que deben pagarlos de sus propios bolsillos y, en la mayoría de los casos, los hace inasequibles. En 2001 se firmó el Acuerdo de Doha, que permite que un país se salte una patente cuando declara crisis sanitaria. Se obliga también a los miembros de la OMC a facilitar la exportación de medicamentos genéricos a los países con escasa capacidad de producción propia. Los laboratorios muchas veces ofrecen productos a bajo precio, pero que son de primera línea. Sin embargo, también son necesarios los de segunda línea, los que permitan a los enfermos mantener una aceptable calidad de vida, pero estos no los rebajan.

Investigación y Desarrollo (I+D)

Solo el 10% de la I+D a escala mundial se dirige a las enfermedades responsables del 90% del problema sanitario mundial. Salvo el SIDA, las enfermedades que afectan a los países pobres afectan indirectamente a los ricos, y la inversión que se destina a I+D es casi inexistente.

Entradas relacionadas: