Cristóbal Balenciaga: El Genio de la Moda del Siglo XX

Enviado por Chuletator online y clasificado en Arte y Humanidades

Escrito el en español con un tamaño de 8,07 KB

Gran habilidad a las aristócratas que veranean en la zona, lugar de reposo de la clase alta. Con su apoyo, abre su primera casa de costura allí, y después en Barcelona y Madrid. Pronto su enorme talento le hace favorito de las mujeres muy adineradas de todas estas ciudades. Al estallar la Guerra Civil Española, sus sedes cesan la actividad y apoyado por algunos amigos se instala en París, para continuar con el floreciente negocio que tenía en España e iniciar su expansión internacional. Instalado en la elegante Avenida Georges V, en el centro de París, entusiasma a la prensa y conquista la mejor y más rica clientela internacional.

Balenciaga fue un genio de la innovación: profundo y reflexivo. Revolucionó la moda creando siluetas de nuevas proporciones y volúmenes. Un trabajo impecable e insuperable que le ha convertido en uno de los grandes de la moda del siglo XX. Trabajó a fondo sus ideas, más allá de las estaciones y las temporadas. Evolucionó sus formas, hasta depurarlas al máximo, siguiendo su propia línea, sin pensar en tendencias ni modas. Crea un estilo único, con obras maestras en todos los momentos del guardarropa. Además del rápido éxito y reconocimiento internacional por la excelente calidad de su trabajo, Balenciaga tenía a las clientas encantadas por su forma de realzar sus virtudes físicas y de disimular como nadie sus defectos. Adelantado a su tiempo, a sus colegas, propone siluetas nuevas, casi abstractas que van más allá de las modas del momento, estas son sus ideas:

A/ Sastrería Depurada

A finales de los años 40, presenta la línea “Barrel”, que al contrario que la moda de la época impulsada por Dior, hace desaparecer la cintura, creando una silueta cómoda y flexible. Este tipo de formas “Cocoon” son una constante en su trabajo. A inicios de los 60, las trabaja más recortadas y compactas. Su depurada técnica para las mangas, destacan las japonesas, hace que estos trajes chaqueta, sean simplemente perfectos; en la época fueron muy aclamados y copiados. A inicios de la década de los 50, propone las innovadoras prendas “semi-ajustadas”, una de las cosas más personales y complejas en sastrería de los 50. A mediados y finales de esa misma década la silueta evoluciona hacia líneas más verticales, más estilizadas, esas siluetas reciben el nombre de “túnica” y “saco” son muy modernas y minimalistas. Una de las piezas, tanto de día como de noche más maestras, son los abrigos. Podemos establecer ciertos paralelismos con la indumentaria tradicional nipona; prendas como los kimonos, envolventes y de gran volumen, con sisas japonesas y el mínimo de costuras.

B/ Blusones y Vestidos

La genialidad de Balenciaga se desarrolló en el resto de categorías del guardarropa; siempre formal y elegante claramente dividido en cuatro categorías: sastrería diurna (mañana), vestidos de tarde, cocktail y gran gala. En estos últimos ámbitos, Balenciaga despliega también su revolución volumétrica, además de una sobria pero rica fantasía decorativa. Desarrolla la línea “ballon”, trabajando los volúmenes abullonados, vistosos drapeados y formas redondeadas, esta línea se recortaría hacia el final de la década de los 50. Son muy destacables también, los blusones simples y blusas con espectaculares mangas abullonadas. A final de la década de los 50, se anticipa a la trapezoidal silueta de los 60 y presenta sus fabulosos vestidos “baby doll”. Los más espectaculares, los de cocktail, realizados en tejidos sostenidos como el tafetán de seda natural.

C/ Los Vestidos de Cocktail, Noche y Gran Gala

En los vestidos de cocktail y noche, Balenciaga es sublime; su técnica inigualable, se presenta en forma de diferentes inspiraciones artísticas, tanto en la forma como en el color. Gran conocedor de la pinacoteca del Museo del Prado, son Velázquez y sobre todo Zurbarán sus grandes referentes pictóricos. En los años 40 crea los vestidos “Infanta”, recordando los retratos reales de Velázquez. Las líneas “ballon” tuvieron también su versión nocturna: sofisticados vestidos en lujosas sedas drapeadas, con grandes efectos de volumen y asimetría, idea que trabajará en corto y en largo. Desde mediados de la década y ya en los años 60, sus propuestas son “momentos” cumbre.

Balenciaga es un revolucionario de las formas, es sublime y muy atrevido también en el color, sus prendas aportan “majestad” y presencia, son la obra de un genio, por un lado inspirado en la pintura de Zurbarán o Zuloaga. Por otro, influido por el concepto de sensualidad tradicional nipón, que sitúa a la nuca como zona erógena y considera excitante, el movimiento cadencioso, el “crujido” de los pesados tejidos de seda de la indumentaria tradicional. A finales de la década y ya en los 60 representa la línea “Cola de Pavo Real” (Queue de Paon), una sofisticada forma trapecio que deja ver la parte delantera de las piernas y se alarga en una cola posterior, con un efecto muy favorecedor. En los 60, hacia el final de su carrera, su estilo es cada vez más abstracto, más experimental, volumen y forma pura.

D/ Los Abrigos de Gala

Dentro del ámbito nocturno son fabulosos sus abrigos y capas de noche, volúmenes dramáticos, acorde con todas sus líneas (Ballón, cola de pavo, etc.) en tejidos y colores espectaculares, gran presencia y elegancia.

E/ Las Prendas Bordadas y el Corte

Balenciaga crea prendas increíblemente decoradas con bordados soberbios de colores luminosos, vibrantes, desde boleros de noche, a los impactantes vestidos de gala completamente bordados en colores pictóricos por Lesage, el mítico bordado parisino. Además de los bordados muy ricos en contrastes de color, propone bordados a tono del tejido de la prenda, se incluyen los nuevos y modernos materiales plásticos, tan innovadores en la época. En las colecciones de todas las épocas aparecen también soberbias prendas de cocktail y noche realizadas con encajes “Guipures” (encaje grueso) y delicadas plumas y tules.

F/ Los Vestidos de Novia

La casa Balenciaga creó maravillosos vestidos de novia, lujosamente sobrios, majestuosos y de una casta elegancia. Destaca el de la española Fabiola de Mora y Aragón que se casó en 1960 con el Rey Balduino de Bélgica. En los años 60’s los vestidos son absolutamente monacales, con ausencia total de decoración, solo forma y volumen desnudo. Balenciaga depura tanto su técnica que es capaz de hacer un vestido con tan solo una costura, es la obra de un genio.

Balenciaga / Biografía

Balenciaga fue en los 50 la más cara y rentable de las casas de costura. Tuvo cierto éxito con sus perfumes, sobre todo con “Le Dix”, pero no quiso que el negocio se expandiera con multitud de licencias como lo hizo Dior. Con la llegada de los 60, el mundo empieza a cambiar drásticamente, la nueva legislación laboral encarece la alta costura y los jóvenes prefieren otro tipo de moda. Cuando ya había tomado la decisión de cerrar sus casas de costura, recibe el que fue su único trabajo prêt-à-porter: el diseño de los uniformes de las azafatas de Air France (referentes del estilo francés en todo el mundo). En 1968 presenta su última colección y anuncia su retiro, así como el cierre de todas sus casas de París, Madrid, Barcelona y Donostia. Balenciaga deja la costura tras 50 años de plena dedicación a su oficio. Su último trabajo fue el vestido de novia de María del Carmen Martínez-Bordiú, nieta del dictador español Franco. Fallece en 1972, en Jávea (Alicante) y es enterrado en su Guetaria natal.

Balenciaga / Conclusiones

Dior decía de él: “Es el maestro de todos nosotros”. Balenciaga supone el máximo exponente, ya no solo de la alta costura, sino de la creatividad en general. No sólo dominó todos los momentos del guardarropa, o de la profesión, sino que transformó profundamente la moda para siempre. Precursor del minimalismo. Moderno, ligero y a la vez sobrio. Majestuoso, impecable, insuperable, su trabajo fue, es y será un referente para todos los creadores de moda. La obra de un genio.

Entradas relacionadas: