Convivencia de Identidades y Evolución de la Tolerancia Religiosa: Perspectivas de Amin Maalouf
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Convivencia de Identidades Diversas
En primer lugar, debe existir un ambiente de respeto mutuo entre todos los individuos, tanto si compartimos aspectos de nuestra vida como si no, tanto si estamos de acuerdo o disconformes con sus creencias, maneras, aspecto, etc. Partiendo de esta base, Maalouf ejemplifica el caso de los migrantes para mostrar la manera en que podemos coexistir todos en un buen ambiente. Para el país receptor, la llegada de un inmigrante supone nuevas costumbres, idioma y creencias que no comparten y, por tanto, cuanto más rápido aprenda las características del país, mejor. Esta relación es la que el autor intenta mejorar, pues objeta que cuanto más nos abramos las personas de acogida a los que han emigrado, más confianza daremos a dichas personas para que compartan con nosotros su identidad. De este modo, ambas partes se relacionarán, se enriquecerán culturalmente y favoreceremos la convivencia de distintas identidades.
Evolución Histórica de la Tolerancia en el Islam y el Cristianismo
A lo largo de la historia ha existido cierta confrontación entre el Cristianismo y el Islam. En épocas pasadas el Islam era la religión tolerante, que aceptaba fieles de todos los lugares del mundo, una diversidad étnica y cultural. Mientras que el Cristianismo era la religión que había exterminado a muchas personas, acusadas de brujería o herejía entre otros. Esto choca inevitablemente con el concepto que hoy tenemos de ambas creencias, pues son prácticamente lo contrario en la actualidad. Esto se debe a que la continua involucración de otras etnias en el Islam fue debilitando cada vez más su vigencia y, al evolucionar la sociedad cristiana que fue, precisamente, en contra de su propia religión, propició un cambio en la misma.
Relación entre Sociedad y Religión
En este apartado, el autor hace hincapié en el hecho de que se valora demasiado la influencia que ejerce la religión sobre la sociedad, y poco la influencia de la sociedad en la religión. De esta manera determina que, en muchas ocasiones, se han cometido crímenes en nombre de una religión y se le ha atribuido a dichas creencias la culpabilidad de crear asesinos. Sin embargo, según los planteamientos de Maalouf, la realidad es otra distinta. Las religiones no son buenas ni malas, y por lo que a él respecta, son incluso necesarias; no imagina un mundo sin una religión. Volviendo al ejemplo del Cristianismo, el autor explica cómo, en un principio, esta religión presentaba formas totalitarias y las matanzas que emprendió fueron múltiples. Sin embargo, cuando la sociedad cambia y se rebela contra este modelo de opresión, cuando da un giro inesperado y transforma las bases en las que se sostenían sus creencias, el Cristianismo se convirtió en la tolerancia pura y dura. No es que la religión “produzca” personas que estén destinadas a matar, sino que son las personas dispuestas a matar las que se esconden bajo sus símbolos.
El Papel de Occidente y su Influencia en las Identidades Globales
Las sociedades del mundo entero, según nos afirma Maalouf, estaban preparadas para que una sola civilización, la de Occidente, dominara. Comenzaron a desarrollarse en la medicina, la tecnología, la física y otros muchos aspectos, de tal manera que monopolizaron todos los ámbitos. Ello suponía y supone actualmente una amenaza para los demás países de Oriente, ya que se ven superados ampliamente. Estas circunstancias conllevaron en un principio a imitar el modelo de Occidente para intentar modernizarse conjuntamente, pero esta parte no veía conveniente que alcanzaran su nivel, por lo que, en cierto modo, reprimió el avance de las otras sociedades. De esta manera, el Oriente se vio obligado a desprenderse de parte de su identidad y acomodarse a las exigencias de los occidentales, pues en primer lugar su lengua es imprescindible para sobrevivir, y sin su tecnología prácticamente tampoco. Progresivamente Occidente se ha hecho con el control del mundo, y para los orientales esto supone una amenaza de lo que son, pues ha perdido costumbres o las perderán en un futuro próximo, al igual que otros aspectos que conformaban una identidad sólida y que ahora no lo es tanto.
La Influencia de Occidente en el Contexto Global Actual
Actualmente estamos viviendo una situación similar. El continente americano está ejerciendo una importante influencia en la cultura de Occidente y también en la de Oriente, que previamente había sido supeditada por la occidental como hemos nombrado. Los países anglosajones se están haciendo con el monopolio del mundo y ello afecta a todos. Como en el caso anterior y citando un ejemplo parecido, hoy día es necesario saber inglés para sobrevivir. En cualquier trabajo, en cualquier país que visitemos, será el idioma por excelencia y el que todos debemos conocer. Por una parte, esto supone una pérdida de la cultura propia, pues saber nuevos idiomas y nuevas culturas es enriquecerse como persona, pero no cuando debes aprenderlo por el hecho de que si no lo conoces no podrás comunicarte con nadie. En resumen, el control de América, la gran potencia, sobre el mundo se hace más notable día a día y, al igual que lo hizo Occidente algunos siglos atrás, está reprimiendo en cierta medida el desarrollo de los demás países. Es aceptable pensar que, según los planteamientos del autor, algunos se sientan amenazados y, por defender su identidad, emprendan alguna acción violenta que más tarde podremos lamentar.
El Crecimiento del Fenómeno Religioso en el Mundo Árabe en el Siglo XX
El autor nos describe el contexto en que se va a desarrollar este crecimiento del fenómeno religioso árabe. En el siglo XX pierde atractivo el marxismo y el nacionalismo árabe, confiscado por regímenes corruptos que han perdido su credibilidad; además, muchos se ven atraídos por la prosperidad, el estilo de vida y las proezas de Occidente. Todos los que ansían las mismas ventajas y que pertenecen a los grupos menos privilegiados que no tienen la posibilidad de emigrar, son los que quieren cambiar el orden establecido, abolir las desigualdades, el desempleo y la administración arbitraria. Estas personas son las que tratan de encontrar su sitio en un mundo que se transforma continuamente, y por ello, se ven tentados por el movimiento islamista; se adhieren a movimientos religiosos para combatir el descontento social que sufren.