Conceptos Fundamentales del Marxismo: Una Guía Completa
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1. Capital
En Economía, el capital es un factor de producción. Es la cantidad de recursos, bienes y valores disponibles para satisfacer una necesidad o llevar a cabo una actividad definida y generar un beneficio económico o ganancia particular. Sin embargo, para el filósofo Marx, hablamos de valor que se valoriza. La forma inicial del capital es una masa de dinero cuya utilización en el proceso productivo capitalista permite a su dueño obtener una cantidad mayor que la inicial. Es decir, hablamos de que el dinero sirve para comprar maquinarias y materias primas por una parte, y fuerza de trabajo por la otra; vale decir, capital constante y capital variable. Una vez que posee capital constante y variable, el capitalista puede organizar la producción de un determinado bien. El valor de una unidad de ese bien debe ser mayor que la suma de las partes de capital constante y variable que se han usado en su producción.
2. Alienación
La teoría marxista de la alienación, en la filosofía marxista, es la interpretación ideológica de esta sobre el concepto psicológico y sociológico de alienación en los relatos de trabajo, porque el trabajador en el capitalismo no es considerado como persona, sino como cualquier cosa equivalente a una cierta cantidad de dinero y utilizable para la multiplicación del dinero mismo. Marx, quien es deudor de la filosofía hegeliana, toma el término y lo aplica a la materialidad; en concreto, a la explotación del proletariado y a las relaciones de propiedad privada. En su enfoque desde el marxismo al proceso de alienación, denominó alienación a las distorsiones que causaba la estructura de la sociedad capitalista en la naturaleza humana. Aunque era el actor el que padecía la alienación en la sociedad capitalista, Marx centró su análisis en las estructuras del capitalismo que causaban tal alienación.
3. Valor
El valor de un bien está determinado por la cantidad de trabajo socialmente necesario para producirlo. La cantidad de trabajo que un bien encierra se mide por el tiempo de trabajo que se gastó en producirlo. Esto no significa —advierte el marxismo— que las mercancías encierran tanto o más valor cuanto más holgazán o más torpe sea el hombre que las produce o, lo que es lo mismo, cuanto más tiempo tarde en producirlas. Por ello se habla de tiempo de trabajo socialmente necesario, o sea, aquel que se requiere para producir una mercancía cualquiera, en las condiciones normales de producción y con el grado medio de destreza e intensidad de trabajo imperantes en la sociedad.
4. Infraestructura y Superestructura
La infraestructura es la base material de la sociedad que determina la estructura social y el desarrollo y cambio social. Incluye las fuerzas productivas y relaciones de producción. De ella depende la superestructura. Las tesis marxistas más claras relativas a la infraestructura son las siguientes:
- Es el factor fundamental del proceso histórico y determina el desarrollo y cambio social.
- La componen las fuerzas productivas y las relaciones de producción.
- De ella depende la superestructura (formas jurídicas y políticas, filosofía, religión, arte, ciencia...).
Superestructura: La tesis básica del materialismo histórico en el que la superestructura depende de las condiciones económicas en las que vive cada sociedad, de los medios y fuerzas productivas (infraestructura).
Se entiende por superestructura al conjunto de los fenómenos jurídico-políticos e ideológicos y las instituciones que los representan. La base económica (infraestructura) de la sociedad determina siempre la superestructura. Marx y Engels postulan que para estudiar la sociedad no se debe partir de lo que los hombres dicen, imaginan o piensan, sino de la forma en que producen los bienes materiales necesarios para su vida. La determinación de la superestructura por la infraestructura no debe entenderse como una determinación mecánica, sino como una determinación de última instancia; vale decir, que las condiciones económicas finalmente determinan, pero las otras instancias de la sociedad desempeñan también un papel.
5. Trabajo
Actividad por la que el hombre transforma la realidad para satisfacer sus necesidades físicas y espirituales. En las sociedades de explotación, el trabajo se vive como una experiencia alienada y no como una actividad de autorrealización.
Marx caracteriza al hombre como un ser dotado de un “principio de movimiento”, principio que determina su impulso para la creación, para la transformación de la realidad. El hombre no es un ser pasivo sino activo, y el trabajo o la actividad personal es la expresión de sus capacidades físicas y mentales, el lugar en donde el hombre se desarrolla y, de ahí que el trabajo no sea un mero medio para la producción de mercancías, sino un fin en sí mismo y que pueda ser buscado por sí mismo y gozado.
6. Plusvalía
Beneficio que obtiene el capitalista con la venta de las mercancías producidas por el trabajador.
El valor de uso es el valor que un objeto tiene para satisfacer una necesidad. Sin embargo, por otro lado, cabe destacar el llamado valor de cambio, que es el valor que un objeto tiene en el mercado y se expresa en términos cuantitativos, medidos por el dinero. Dos objetos con diferente valor de uso pueden tener el mismo valor de cambio si así lo determinan las leyes del mercado; por ejemplo, un ordenador puede costar lo mismo que una moto. No obstante, el rasgo peculiar de la sociedad capitalista es que en ella la fuerza de trabajo es también una mercancía. Por ejemplo, de las ocho horas que el trabajador trabaja, una parte trabaja para él (la que revierte en lo que realmente le paga el empresario) y otra para el empresario (la que da lugar al exceso de valor de cambio que no revierte sobre el trabajador y que da lugar a la ganancia del empresario o plusvalía).
La propuesta del marxismo es la desaparición de la plusvalía; es la idea de que el valor del objeto producido por el productor vuelva a este; bien sea porque los beneficios se reparten directamente entre todos los obreros, o bien sea porque el Estado los restituye indirectamente al productor en la forma de otros bienes de los que puede disfrutar.