El Arte y la Mitología del Antiguo Egipto: De Isis a las Pirámides de Giza

Enviado por Programa Chuletas y clasificado en Griego

Escrito el en español con un tamaño de 4,07 KB

Isis Lactans

Isis, alimentando a su hijo Horus. Anónimo. Escultura egipcia en bronce. Escultura de bulto redondo, escultura sedente. La diosa es venerada desde el siglo VII a. C. hasta el II milenio a. C. Figura femenina hierática, sin expresión de sentimientos, ceremoniosa y solemne. Sentada sobre un trono, portando el atuendo atributo de los cuernos de la diosa Hathor y el disco solar, porta en su frente la diadema que sujeta el nemes, la cobra que era la diosa Vadjet, llamado Uraeus o ureus. La cobra o la serpiente era una protección en el más allá.

La diosa Isis es una de las diosas más importantes del panteón egipcio. Según la mitología egipcia es hermana y esposa del dios Osiris y madre del dios Horus. Hay muchos epítetos que la identifican, pero algunos de ellos se refieren a ella como la gran diosa madre o diosa de la fecundidad y maternidad. En su iconografía se la representa con un trono como atuendo sobre su cabeza, aunque aquí se representa con los cuernos de la diosa Hathor y el disco solar.

Se representó iconográficamente como Isis Lactans con Horus sobre sus rodillas. Horus en el mismo estilo que la diosa, hierático, sin apenas rostro, con las manos pegadas al cuerpo. La leche era el símbolo de salvación y la diosa era la imagen de esta forma universal de subsistencia. Isis fue la imagen de madre, nodriza y matrona; fue la protectora de las madres y esposas en su papel de sostén de la vida humana. Una imagen que nos recuerda bastante a la imagen de la Virgen María con Cristo Niño en brazos y amamantándolo.

Las Pirámides de Giza

Sin duda, las pirámides, único resto superviviente de las siete maravillas del mundo antiguo, a pesar de su deterioro a causa del tiempo y de la acción de los hombres, sigue cautivando e impresionando. Nos encontramos básicamente frente a unas tumbas, acompañadas de sus respectivos templos. Sin embargo, para la mentalidad del egipcio antiguo, la pirámide era mucho más que una simple tumba. Era la residencia para la momia del faraón desde donde éste accedería a la "nueva vida". Era su construcción, por lo tanto, una prioridad en el reinado de cualquier faraón y cabe mencionar lo sorprendente que aún hoy en día resulta su construcción en una época donde los medios técnicos eran precarios, no se conocían ni el hierro ni la rueda, así como la capacidad organizativa que tuvo que mostrar el estado egipcio a mediados del tercer milenio antes de Cristo, cuando Europa aún vivía sumergida en la Edad del Cobre. Este hecho ha alimentado en la imaginación popular la imagen de esclavos empujando enormes bloques de piedra de varias toneladas de peso. Sin embargo, estudios arqueológicos realizados en las inmediaciones de las pirámides nos han hecho ver una realidad muy diferente en la que la construcción de la pirámide era una labor que involucraba a todo Egipto, considerada fundamental para la supervivencia del estado, y en la que los obreros eran bien alimentados y vivían en condiciones incluso mejores que la mayoría de los campesinos.

Tríada de Micerino

En esta imagen podemos ver una escultura del antiguo Egipto. Más concretamente, fue esculpida entre los años 2530 a. C. y 2500 a. C. Es una O.D.A. de autor desconocido. Está tallada en roca de diorita y está realizada mediante talla directa sobre la piedra, con pulimentado posterior. Este conjunto está esculpido en pizarra. Observamos tres cuerpos humanos, cada uno representa a una divinidad egipcia. El faraón Micerino se encuentra situado entre Hathor y la diosa Cinopolis.

El faraón está en una posición de avance, Hathor tiene su pierna izquierda levemente adelantada y la diosa está hierática. Las tres figuras se rigen por el canon de los 18 puños, muy utilizado por los artistas del Antiguo Egipto.

Entradas relacionadas: