Arte Islámico desde el Siglo XI: Selyúcidas, Mongoles, Almorávides y Almohades

El Arte Islámico a partir del Siglo XI: Selyúcidas y Mongoles en Oriente, Almorávides y Almohades en el Norte de África y Al-Ándalus

A partir del siglo XI, en Al-Ándalus, el Califato de Córdoba se desintegra con la muerte de Al-Hakam II y surgen los Reinos de Taifas. Estos reinos, gobernados por pequeños reyes, incluyen destacadas ciudades como Toledo, Zaragoza y Sevilla. Las formas arquitectónicas creadas en el siglo X perviven en el siglo XI, como las plantas de los edificios, los arcos de herradura y la línea del intradós y del extradós. En muchos de estos reinos se utilizan materiales económicos, aunque con apariencia lujosa. Sin embargo, hay excepciones, como en Zaragoza, donde se emplean mármoles para la construcción del salón principal.

Selyúcidas

El Imperio Selyúcida conquistó un vasto territorio que incluía dos ciudades importantes: Merv e Isfahán. Los selyúcidas, o selyuquíes, son reconocidos como los mejores constructores en ladrillo de toda la historia del Islam. A partir de los selyúcidas, se mantendrán las técnicas constructivas, utilizando ladrillo, adobe, enlucidos y el arco apuntado.

Mezquita Alhama de Isfahán

La Mezquita Alhama de Isfahán es el mejor ejemplo de mezquita con patio central y cuatro iwanes. Está distribuida en tramos, cada uno coronado por una cúpula, y posee una monumentalidad impresionante. Considerada la más importante de Oriente, sufrió grandes transformaciones hasta el siglo XVII. Aunque inicialmente fue una mezquita de patio, los cuatro iwanes se añadieron en el siglo XVII, durante la época safávida, cuando se convirtió en una madrasa. En la época selyúcida se construyeron las dos grandes cúpulas que la caracterizan. Los arcos son apuntados y cada uno de los tramos lleva una pequeña cúpula. Toda la mezquita está construida en ladrillo, incluso las columnas, que están recubiertas de estuco.

La cúpula principal es perfecta. La transición de la planta cuadrada a la cúpula se realiza mediante un polígono de 16 lados, logrando un paso muy suave. Se utilizan soportes sin capitel ni basa. A pesar de ser de ladrillo, toda la estructura está decorada con atauriques. Inicialmente, la cúpula era calada, con pequeños espacios que permitían la entrada de luz del exterior.

Mausoleo del Sultán Sanyar en Merv

El Mausoleo del Sultán Sanyar en Merv, construido a mediados del siglo XII, es el siguiente gran mausoleo después de los mencionados anteriormente. Su ejecución es maravillosa, especialmente en el interior, que está más ornamentado. Sigue el mismo esquema de qubba. La balaustrada de la galería superior es transitable y oculta la transición de la planta cuadrada a la cúpula. Se emplean angrelados, pequeños lóbulos decorativos entre arco y arco. El interior presenta una decoración pintada, aunque actualmente no conserva toda la pintura original. Originalmente, la estructura de ladrillo se cubría con un enlucido y luego se pintaba con pintura o yeso. A partir de este momento, esta técnica se convertirá en habitual en Oriente, y los mongoles también la adoptarán.

Mongoles

Entre los mongoles destaca Gengis Kan, conocido como "el universal". En 1258, los ilkanes conquistaron Bagdad, poniendo fin a la dinastía abasida.

Conjunto Funerario de Oljaytu en Sultaniyya

El Conjunto Funerario de Oljaytu en Sultaniyya (1315) es el lugar de enterramiento de Oljaytu. El mausoleo se encuentra dentro de un recinto fortificado, a partir del cual se construyó la ciudad. Aunque exteriormente parece cuadrado, el interior es poligonal desde la base y culmina con una enorme cúpula. La cúpula exterior era de un característico color azul. En la galería superior había decoración de mocárabes. Los colores utilizados en la decoración son azules, blancos y negros. Los ladrillos vitrificados son azules, lo que da a la bóveda su color característico. En el interior, se aprecia un juego espectacular con el ladrillo, logrando diferentes tonos según el grado de cocción.