Antonio Buero Vallejo: Un dramaturgo comprometido con la crítica social

Antonio Buero Vallejo

Nació en Guadalajara en 1916. En 1936 se alista en el ejército republicano y al terminar la guerra es condenado a muerte, pero lo sustituyen por 30 años de cárcel. En 1949 obtiene el premio Lope de Vega con “Historia de una escalera” y accede a su primer escenario. La obra es un éxito y su fama se extiende por Europa y EEUU. En 1986 obtiene el Premio Cervantes, que será su máximo reconocimiento.

Crítica social

Es un aspecto fundamental de sus obras. Analiza la sociedad española con todas sus injusticias, mentiras y por otro lado, persigue la búsqueda de la felicidad, la libertad… Ya que está obstaculizada por el mundo. Los temas se enfocan con un doble plano: el plano existencial, que refleja la meditación sobre el sentido de la vida y la condición humana; y el plano social y político, que denuncia injusticias concretas. La ética se manifiesta en la defensa de la dignidad del hombre, hace una reflexión sobre la situación del hombre en el mundo. Es un teatro existencial. Las obras (cercanas a la tragedia) se estructuran como la búsqueda de la verdad por parte de un personaje. La purificación final (catarsis) debe alcanzar también al espectador. En la técnica dramática, podemos destacar el uso dramático del tiempo. El autor crea un juego de perspectivas que persigue que el distanciamiento ayude a la superación del conflicto al personaje y al espectador. El tratamiento del espacio permite tener varios escenarios a la vez, que van cambiando mediante la utilización de la luz y el sonido. Los efectos de inmersión son una manera de hacer que el espectador sienta las cosas como las percibe el personaje. El realismo simbólico, le sirve para hacer referencias políticas, hablar de una dimensión existencial, o para presentar personajes con taras físicas o psíquicas.

Los personajes encarnan actitudes vitales, opuestas en el modo de afrontar la vida, busca que el espectador reflexione. Son personajes complejos que experimentan una transformación. Se distingue entre personajes: activos, que actúan movidos por el egoísmo y los instintos; y los contemplativos, que se sienten angustiados, son conscientes de sus limitaciones pero sueñan con un imposible y están abocados al fracaso.

Evolución

Primera época: (hasta 1957) predomina el enfoque existencial. Ej “Historia de una escalera” (1949). Segunda época: (1958-1970) es paralela al realismo social, insiste más en las relaciones entre el individuo y su entorno. Los actos individuales quedan enmarcados en un tiempo y unas estructuras sociales concretas haciendo hincapié en las causas y las consecuencias. Ej “El tragaluz” (1967). Tercera época: (desde 1970) es una intensificación de la etapa anterior. Ej “La fundación” (1974), nos introduce en una celda de presos políticos donde se reflexiona sobre la realidad, la lucha por transformarla, el ideal de libertad… Contenidos sociales y políticos más concretos. Novedades técnicas como el “efecto de inmersión”.