Ortega y gasset 1
En la lección X de ¿Qué es fiosofía?, Ortega plantea el descubrimiento de una nueva concepción de la realidad que vendría a superar el realismo y el idealismo que han dominado la historia de la filosofía desde sus inicios. Si los filosofos de la Antigüedad otorgaron prioridad a los objetos (mundo), y los de la Edad Moderna, a las ideas (sujeto), la concepción orteguiana encontrará en la idea de "vida" la realidad radical. La vida en para Ortega la realidad en la que aparecen interrelacionados el yo y el mundo. Para José Ortega y Gasset (representante del vitalismo en su sentido biológico y biografico), la filosofía es constitutivamente necesaria al intelecto. La razón de la filosofía es la rebeldía radical frente a la conciencia ingenua que se contenta con lo que está ahí como patente y dado. Lo que hallamos ante nosotros ha de ser remitido al algo distinto, a ese "ser fundamental" del mundo al que, según Ortega, aspira la filosofía. La filosofía para él tiene notas características: - a) Plantearse un problema absoluto, no partir de creencias previas. - b) Partir de un imperativo de autonomía: no apoyarse en nada anterior a la filosofía misma. - c) Universalismo, esto es, afán intelectual hacia el todo. - d) Ser un conocimiento teórico, un sistema de conceptos intersubjetivo. Según Ortega, en cada época de la historia de la filosofía se han dado respuestas diferentes acerca de la realidad del Universo. A) Para el mundo griego la realidad más indudable era el ser cósmico, lo dado, la Naturaleza. El ser verdadero es el soporte de las cualidades aparentes y sensibles. Pero ese realismo griego no descubrió la conciencia, el yo. B) Para los modernos, a partir de Descartes y demás idealistas, la realidad más indudable es el yo, la conciencia, el sujeto. La mente es el centro y soporte de toda realidad. Las cosas son meros contenidos de la conciencia. Ortega critica el iealismo (A) y el idealismo (B) por su unilateralidad: las cosas no sólo dependen de que yo las piense, de mi subjetividad, porque mi subjetividad también depende de que existan objetos. Por otra parte hace también una crítica a la ciencia (realismo a ultranza) porque, aun resolviendo gran cantidad de problemas, nada tiene que decir sobre el ser humano. Y esto es porque el hombre no es una cosa, un objeto acabado, ya que "el hombre no tiene naturaleza, sino que tiene historia". La postura de Ortega quiere ser superadora de las anteriores y propone como dato radical el que existimos tanto "yo que pienso" como "el mundo en que pienso". La vida humana incluye el sujeto y el mundo- Existo yo con mi mundo y en eso consiste la realidad radical que es mi vida.
Frente a las posturas filosóficas anteriores que defendían el "ser suficiente" (Naturaleza o Sujeto), Ortega propone el "ser indigente", es decir, el ser necesitado que incluye tanto el yo como el mundo. Y eso es la realidad radical que es mi vida. Así pues el concepto orteguiano de vida incluye la conciencia y el mundo coexistiendo. La realidad radical es nuestra vida, la de cada uno en particular, porque cualquier tipo de realidad supone de antemano mi vida. Así , el ser del mundo no es alma (B) ni materia (A) sino perspectiva, una perspectiva única e intransferible (mi perspectiva) que se entronca en una determinada circunstancia humana y sobre todo histórica. Somos esencialmente circunstanciales: yo soy yo y mi circunstancia, realidad concreta que vive aquí y ahora. Ciencia, filosofía y religión aparecen así , como "reacciones" del hombre ante una situación vital, como instrumentos que utiliza la vida humana ante la realidad problemática. Para él, el vitalismo es la posición que afirma que el conocimiento, aún siendo racional, está arraigado en la vida, es decir, que la razón pura debe fundamentarse en la totalidad de la razón vital. La razón no está fuera de la vida ni tampoco es la vida, es una función de la vida. Razón, es pues, un término que designa todos los actos que "dan razón de" y especialmente que dan razón de los hechos vitales. En este sentido, la actitud filosófica de Ortega se denomina racio-votalismo. La vida de cada cual es su existencia particular y concreta que reside entre circunstancias y sobre todo orientándose hacia su propia mismidad, autenticidad o destino. Si el hombre se aleja de su autenticidad será menos real. A diferencia de las cosas, el hombre, admite grados de realidad, según su mayor o menor acercamiento a su destino. Según Ortega, los atributos o categorí as en que consiste el vivir son: -Vivir es vivirse, sentirse vivir, saberse existiendo (La piedra no se siente ni sabe ser piedra). -Encontrarse en el mundo. Mundo no es aquí naturaleza, como creí an los antiguos, sino lo que nos afecta, es decir, las cosas que nos interesan, nos acarician, nos amenazan, etc. -Estar en el mundo ocupado en algo. La vida es un quehacer y, ademá s, el resultado de ese quehacer es tambié n mi vida. -Ocuparse de algo para algo: Finalidad. -Yo he decidido lo que hago: vida como anticipació n y proyecto. -Si decido es porque vivir es hallarse en un mundo que ofrece posibilidades y yo puedo escoger porque tengo "libertad para..." -Pero las posibilidades no son ilimitadas: circunstancias. -Temporeidad: la sustancia de la vida es el tiempo: el hombre no tiene naturaleza sino historia.
Frente a las posturas filosóficas anteriores que defendían el "ser suficiente" (Naturaleza o Sujeto), Ortega propone el "ser indigente", es decir, el ser necesitado que incluye tanto el yo como el mundo. Y eso es la realidad radical que es mi vida. Así pues el concepto orteguiano de vida incluye la conciencia y el mundo coexistiendo. La realidad radical es nuestra vida, la de cada uno en particular, porque cualquier tipo de realidad supone de antemano mi vida. Así , el ser del mundo no es alma (B) ni materia (A) sino perspectiva, una perspectiva única e intransferible (mi perspectiva) que se entronca en una determinada circunstancia humana y sobre todo histórica. Somos esencialmente circunstanciales: yo soy yo y mi circunstancia, realidad concreta que vive aquí y ahora. Ciencia, filosofía y religión aparecen así , como "reacciones" del hombre ante una situación vital, como instrumentos que utiliza la vida humana ante la realidad problemática. Para él, el vitalismo es la posición que afirma que el conocimiento, aún siendo racional, está arraigado en la vida, es decir, que la razón pura debe fundamentarse en la totalidad de la razón vital. La razón no está fuera de la vida ni tampoco es la vida, es una función de la vida. Razón, es pues, un término que designa todos los actos que "dan razón de" y especialmente que dan razón de los hechos vitales. En este sentido, la actitud filosófica de Ortega se denomina racio-votalismo. La vida de cada cual es su existencia particular y concreta que reside entre circunstancias y sobre todo orientándose hacia su propia mismidad, autenticidad o destino. Si el hombre se aleja de su autenticidad será menos real. A diferencia de las cosas, el hombre, admite grados de realidad, según su mayor o menor acercamiento a su destino. Según Ortega, los atributos o categorí as en que consiste el vivir son: -Vivir es vivirse, sentirse vivir, saberse existiendo (La piedra no se siente ni sabe ser piedra). -Encontrarse en el mundo. Mundo no es aquí naturaleza, como creí an los antiguos, sino lo que nos afecta, es decir, las cosas que nos interesan, nos acarician, nos amenazan, etc. -Estar en el mundo ocupado en algo. La vida es un quehacer y, ademá s, el resultado de ese quehacer es tambié n mi vida. -Ocuparse de algo para algo: Finalidad. -Yo he decidido lo que hago: vida como anticipació n y proyecto. -Si decido es porque vivir es hallarse en un mundo que ofrece posibilidades y yo puedo escoger porque tengo "libertad para..." -Pero las posibilidades no son ilimitadas: circunstancias. -Temporeidad: la sustancia de la vida es el tiempo: el hombre no tiene naturaleza sino historia.